El SÍ gana en la consulta del Yasuní ¿qué pasará ahora?

Alrededor de la medianoche del domingo 20 de agosto de 2023, los resultados oficiales publicados en el sitio web del Consejo Nacional Electoral (CNE)  muestran que el SÍ gana en la consulta del Yasuní 

Con el 60% de votos escrutados, el SÍ tuvo más del 59 %.

El NO, en cambio, cerca del 41%. . 

Esta consulta buscaba parar las operaciones extractivas de petróleo en el bloque 43 también conocido como Yasuní ITT (Ishpingo, Tiputini y Tambococha). 

Los ecuatorianos y ecuatorianas esperaron 10 años por esta consulta. Captura de pantalla de la página web de resultados del CNE.

Con música, bailes, asientos y sonrisas, miembros del colectivo Yasunidos y otras 50 personas esperaban los resultados de la consulta popular por el Yasuní. La canción Sí al Yasuní, en ritmo de salsa choque, sonaba en la Sala Demetrio Aguilera Malta de la Casa de la Cultura Ecuatoriana . 

Tuvieron que pasar 10 años para que la ciudadanía se pronuncie sobre si quería o no que el petróleo se quede bajo el suelo del bloque Ishpingo, Tambococha y Tiputini en el Parque Nacional Yasuní. 

“Estamos muy felices, es un hito en la historia del Ecuador, no esperamos, sino vamos luchando 10 años y ha sido casi imposible sacar esta consulta popular”, dijo Pedro Bermeo, activista y uno de los impulsores de la campaña. “Es una victoria no para Yasunidos, sino para el Ecuador”, apuntó Bermeo. 

Reacciones al SÍ del Yasuní

Uno de los primeros en pronunciarse fue el candidato presidencial Yaku Pérez, quien en su cuenta de X (antes Twitter) dijo que el país le dijo “Sí a la vida, Sí a la naturaleza, con estos resultados GANAMOS, ganó el país, ganaron nuestras generaciones venideras con un Ecuador que va a cuidar nuestra Casa Grande”.

“Es una victoria para esos locos que creemos que es posible una economía diferente que ya no produzca más exterminio ni contaminación”, dijo Paola Quiroga, una joven que celebraba en la Casa de la Cultura.

Ahí, había desde niños hasta personas mucho mayores. Formaban grupos para conversar, otros jugaban baraja cerca del escenario, y otros estaban de pie, mirando los resultados en la gran pantalla. 

Varias personas acudieron a la convocatoria de Yasunidos a la Casa de las Culturas a esperar los resultados de la consulta. Fotografía de Emilia Paz y Miño para GK.

Luca Bardino, quien trabaja en desarrollo rural dentro y fuera del Yasuní, dijo que estos resultados no son únicamente muy positivos para el país, sino que lo son para el mundo. Porque pueden representar un primer paso “para territorios que viven con problemáticas  extractivistas mayores y demostrar que se puede regresar de esas políticas a través de un voto popular”. 

Silvana García y Gustavo Sánchez estaban en la primera fila de la sala junto a una niña pequeña que miraba con felicidad los distintos colores que reflejaban las luces en la sala. Ambos dijeron sentir una “felicidad súper grande” al ver los primeros resultados.  

Piensan que ahora la ciudadanía “tiene que asumir la responsabilidad de lo que acaba de ocurrir y esto es un reto importante porque nos ayuda a madurar como sociedad”. También dijeron que como ciudadanos debemos “hacernos cargo de los procesos que vienen y esperar que los pasos se cumplan también desde el Estado”. 

Qué pasará ahora, tras el Sí al Yasuní

Los ecuatorianos decidieron que en el bloque ITT no habrá más extracción de crudo. La consulta popular, al ser un pronunciamiento ciudadano, según el artículo 106 de la Constitución del Ecuador, es de “obligatorio e inmediato cumplimiento”. 

Es decir, ninguna ley o reglamento será reformado. Quedará en firme una vez que el CNE proclame los resultados oficiales en los próximos días. 

Con este pronunciamiento ciudadano según el dictamen de la Corte Nacional, que dio luz verde a esta consulta, el Estado Ecuatoriano no podría iniciar nuevas relaciones contractuales para continuar con la explotación de petróleo en el Bloque 43. 

La Corte otorgó un plazo “no mayor a un año desde la notificación de los resultados oficiales para la ejecución de los resultados de la consulta”. Aún así, implementar el triunfo del sí en la consulta del Yasuní, tomaría más de 5 años. 

Diego Navarrete, ingeniero de yacimientos de Petroecuador, le dijo a GK que el proceso de cierre de todas las operaciones que se hacen en el ITT, como la perforación de pozos, extracción de crudo y tratamiento del petróleo, tomaría alrededor de cinco o seis años porque en el campo ITT hay alrededor de 230 pozos petroleros.

A parte de los pozos petroleros, según Petroecuador, en el ITT funcionan 12 plataformas. Estas plataformas son usadas para perforar los pozos y llegar a los yacimientos de petróleo. 

Por eso, el plazo de un año que dió la Corte es, para varios funcionarios en entidades públicas, muy corto. Incluso, algunas estimaciones dicen que parar las operaciones y desmantelar las instalaciones, puede tomar más de 10 años. 

Para que Petroecuador comience con el cierre de operaciones el Ministerio de Energía y Minas, que es el ente rector, debe darles directrices para que inicien el proceso. 

Fernando Santos, ministro de Energía y Minas le dijo a GK que «debe contratarse una compañía que analice cuál es la mejor forma, en coordinación con el Ministerio de Ambiente, para evitar daños». El ministro también dijo que el próximo gobierno «tiene que pedir a La Corte una extensión razonable para levantar la infraestructura«. 

Cerrar las operaciones y desmantelar la infraestructura no es tan fácil 

Según Navarrete, todas las instalaciones que están en el bloque 43 necesitan un estudio previo para poder ser desmontadas porque son instalaciones demasiado grandes. El ingeniero explica que en Petroecuador han estimado que los costos de abandono son en total de 467 millones de dólares, pero que podría aumentar al momento de iniciar los trabajos. 

El Ministerio de Ambiente, Agua y Transición Ecológica (Maate) le dijo a GK, en respuesta a una solicitud de información enviada, que “todas las actividades que se llevan a cabo en el Bloque 43, deberán suspenderse” y que el proceso de cierre y abandono tomará entre 5 a 6 años para su ejecución.