El 21 de septiembre de 2022 habrá movilizaciones en Ecuador convocadas por el Frente Unitario de Trabajadores (FUT), la Unión Nacional de Educadores (UNE), el Frente Popular y otras organizaciones sociales. Según sus organizadores, serán pacíficas y no se trata de un paro nacional como el que hubo en junio de 2022, que dejó varias muertes, cientos de heridos y se se perdieron más de mil millones de dólares.
Las movilizaciones serán por la tarde del 21 de septiembre. La concentración en Quito será a las 4 de la tarde en la Caja del Seguro Social, en la entrada al centro histórico de la ciudad.
Desde ahí, dijeron sus organizadores, avanzará de forma pacífica a la Plaza de Santo Domingo. Además, las organizaciones han convocado a que se repliquen las movilizaciones en otras ciudades del país.
Según la convocatoria, las movilizaciones se hacen “en defensa” del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS). Las organizaciones dicen que exigen que:
- El gobierno y los empleadores privados paguen la deuda que tienen con el IESS.
- Que el Seguro Social sea “despolitizado” y administrado por sus propios dueños, los trabajadores afiliados y jubilados.
- También pidieron “cárcel para los corruptos que perjudican a la institución”. No especificaron a quiénes se refieren con ese pedido.
- Haya medicinas para los afiliados.
El IESS, en problemas desde hace años
Desde hace décadas, el IESS arrastra problemas financieros. En los últimos meses, esos problemas han causado que haya escasez de medicinas, falta de personal y se deje de atender a los pacientes derivados de la seguridad social en Solca, una organización médica privada dedicada al tratamiento del cáncer en sus distintas formas.
El mensaje con el que las organizaciones han convocado a las movilizaciones del 21 de septiembre es “el seguro social NO está quebrado, está mal administrado”. Las organizaciones dicen que la causa de los problemas financieros de la institución es la deuda que el Estado tiene con el IESS.
Hasta febrero de 2022, el Estado le debía un total de 8.226 millones de dólares al IESS, según datos del propio Instituto. En mayo de 2022, el gobierno anunció que por primera vez en 21 años pagaría la deuda que tiene con el IESS. Los 140 millones de dólares representan 1,7% del total de la deuda.
Ese pago se hizo días después de protestas en las afueras de los hospitales del IESS por la escasez de medicamentos y la falta de servicios y recursos.
Para continuar con los pagos, el Ministerio de Economía dijo que se estableció un calendario de entrega de información del IESS al Ministerio y que cuando la información “sea validada, se suscribirán, entre ambas entidades, convenios específicos que formalizarán los montos a transferir por cada periodo revisado”.
El IESS dijo que los 141 millones entregados —y el que se recibirá gradualmente— se destinarán al Fondo de Salud, que sirve para financiar los servicios de salud que ofrece a sus afiliados. Así, dijo el IESS en un comunicado de mayo de 2022, esperan “cubrir el déficit presupuestario que actualmente presenta, producto de esta deuda, para continuar brindando los servicios de salud a los afiliados y pensionistas”.
La deuda con Solca
La falta de liquidez del IESS también ha causado que varias veces la Sociedad de Lucha contra el Cáncer (Solca) se niegue a atender nuevos pacientes con cáncer que derivados del IESS. La deuda total del IESS con Solca asciende a 140 millones de dólares.
Las autoridades de las dos instituciones llegaron a un acuerdo de pago en abril de 2022, después de un prolongado reclamo por falta de recursos y el anuncio de que Solca no recibiría más pacientes derivados del IESS.
Meses después, en agosto de 2022, Solca dijo que el IESS seguía sin cumplir con lo acordado y otra vez se suspendió la atención. Sin embargo, días después, las autoridades de las instituciones hablaron y acordaron retomar la atención.
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