La segunda veda del cangrejo de 2022 será desde el 15 de agosto hasta el 15 de septiembre. Esta medida se aplicará para el cangrejo rojo y el azul. En este periodo no se podrá capturar, transportar, poseer, procesar ni comercializar de forma interna ni externa estos dos tipos de cangrejo. La veda del cangrejo se aplica en todo el país. 

Según la Ley Orgánica para el Desarrollo de la Acuicultura y Pesca, la veda es un “período establecido por la autoridad competente durante el cual se prohíbe extraer los recursos hidrobiológicos o una especie en particular, en un espacio, área, zona, y tiempo determinados”. Es decir, es una temporada en la que está prohibido pescar o atrapar ciertas especies. 

Según el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés), las vedas son necesarias para “evitar la depredación de los recursos naturales y permitir su reproducción y subsistencia”. 

¿Qué especies no se podrán capturar hasta el 15 de septiembre?

El cangrejo rojo es —o Ucides Occidentalis— es una especie que habita en los manglares —árboles y arbustos que crecen entre la tierra y el mar y protegen las costas tropicales— en las provincias costeras de Guayas y El Oro. Este tipo de cangrejos ayudan a remover hojas frescas, flores y frutos que se caen de los manglares para reciclar la materia orgánica de los árboles. Además, contribuyen a la oxigenación de los suelos. 

El cangrejo azul —o Cardiosoma Crassum— se llama así por el color de sus patas. National Geographic dice que su caparazón es de “color pardo moteado” —un tono de café— y que las hembras tienen “destellos rojizos en las puntas de las pinzas”. Esta especie normalmente habita en estuarios —donde se intercambia agua salada y dulce— y lagunas salobres. En Ecuador, está principalmente en Esmeraldas, al norte del país. 

Cangrejo rojo ecuatoriano. Fotografía tomada de la página web del antiguo Ministerio de Acuacultura y Pesca.

¿Por qué hay veda del cangrejo en agosto y septiembre?

Esta veda fue establecida en un acuerdo ministerial de febrero de 2004. El documento dice que del 15 de agosto al 15 de septiembre de cada año habrá una veda “de muda” para estos animales. Las restricciones fueron establecidas porque en este periodo el cangrejo se desprende de su carapacho para tener uno nuevo —conocido como muda o ecdisis— y segrega un compuesto químico que es perjudicial para la salud. 

Según el Instituto Nacional de Pesca, en el endurecimiento del nuevo carapacho, estos animales producen oxalato de calcio, una sustancia que causa problemas digestivos leves y severos en las personas que lo consumen. 

Además, el Instituto Nacional de Pesca dice que en este tiempo el cangrejo pasa por “una etapa sensible y vulnerable” que no debe ser interrumpida por un capturador. Por eso, además de proteger la salud humana, la veda debe ser respetada para cuidar a las poblaciones del animal. 

A principios de 2022, hubo otra veda para el cangrejo rojo y el azul. En esos casos fue una medida para proteger su reproducción. La del rojo fue del 1 de febrero al 2 de marzo y la del azul del 15 de enero al 15 de febrero. Se establecieron esos periodos porque son las temporadas de precortejo y cópula de las dos especies. Al prohibir su captura, transporte y consumo, se permitía que se reproduzcan de forma normal para garantizar su supervivencia. 

Un cangrejo azul. Fotografía tomada del del sitio web del desaparecido Ministerio de Acuacultura y Pesca

¿Cuáles son las consecuencias de incumplir una veda?

La Ley Orgánica para el Desarrollo de la Acuicultura y Pesca dice que hay sanciones por violar la veda y que se impondrán dependiendo de la gravedad de la infracción: 

• No reportar cuántos productos están en una bodega antes del inicio de una veda es una “infracción pesquera leve”.
• La pesca de una especie durante una veda es considerada una “infracción pesquera muy grave”. 

Las sanciones incluyen multas de uno —425 dólares en 2022— a mil quinientos salarios básicos unificados —637 mil dólares, dependiendo de la gravedad de la transgresión. Además, la ley dice que se decomisarán las especies, los productos o los bienes obtenidos mientras se incumplía la veda. 

Otras de las sanciones son la suspensión de los permisos autorizados, la incautación de la embarcación que servía para transportar a quienes violaban la vedas y la clausura temporal de los establecimientos que vendan los productos restringidos.