Una de las mayores preocupaciones de los últimos años es el deterioro de las carreteras del Ecuador. Según el Ministerio de Transporte y Obras Públicas, menos del 13% de las vías del país están en muy buen estado. Un 44% está calificado como “bueno”. Sin embargo, en poco más del 43% restante se debe “circular con precaución”. Para remediarlo, el gobierno del Ecuador anunció su “plan vial 2025”, que busca la “rehabilitación, mantenimiento, repotenciación o ampliación” de varias de estas carreteras. 

El anuncio lo hizo el presidente de la República, Guillermo Lasso, el 26 de mayo de 2022 desde el pequeño cantón austral de Paute, en la provincia del Azuay. El sur del Ecuador es uno de los sectores que más ha padecido el mal estado de las carreteras del Ecuador. Según el Ministerio de Transporte y Obras Públicas, en más de la mitad de las vías azuayas hay que “circular con cuidado”.

La comunicación vial hacia Cuenca, la capital de la provincia y la tercera ciudad del Ecuador, se ha complicado al punto de que en viajes que podrían tomar 3 horas, el tiempo se duplica. 

El plan anunciado por el gobierno llega un año después de que Lasso se instalara en Carondelet, en medio de críticas por la falta de inversión pública en su gobierno. Dos días antes de anunciar el plan vial, Lasso hizo referencia a su propuesta durante su primer informe a la Nación, donde dijo que “solo el rubro de infraestructura hemos identificado inversiones por más de 5.200 millones de dólares”.

El 26 de mayo, Lasso dijo en Paute que estos 5.200 millones de dólares son parte del portafolio de inversiones que el país ha presentado en varios foros internacionales. El más reciente, en la visita del presidente a Israel. Lasso adelantó que varias de las obras en los más de 10.2500 kilómetros de vías a cargo del Ministerio de Transporte y Obras Públicas se hará por medio de concesiones —es decir, mediante la entrega de la administración temporal del bien estatal, en este caso, de un tramo de carretera, a una empresa privada. “Esto no es nuevo, ya se lo ha hecho con algunas carreteras del país”, dijo Lasso. 

En el país, hay poco más de 730 kilómetros de vías concesionadas a empresas privadas —es decir, el 7% de todas las carreteras del Ecuador. El Ministerio gestiona directamente el 82%. El pequeño porcentaje restante, está en manos de gobiernos seccionales.

El presidente Lasso en Paute, Azuay, el 26 de mayo de 2022, cuando anunció el plan vial 2025. Fotografía de la Presidencia de la República bajo licencia CC.

Según el Ministerio de Transporte y Obras Públicas, habrá además una inversión estatal directa de 500 millones de dólares hasta 2025 para construir, mantener, reconstruir y atender emergencias viales en el país. 

Alianzas público privadas, preferidas para megaproyectos

La inversión de 5.200 millones de dólares en la infraestructura vial del Ecuador se hará a través de alianzas público privadas. Este mecanismo es, según el Banco Mundial, un acuerdo “de objetivos compartidos” entre el sector público y una o varias empresas privadas. 

Según el Ministerio de Producción ecuatoriano, su objetivo principal es que el sector privado colabore en la provisión de bienes, obras o servicios del gobierno central y de los Gobiernos Autónomos Descentralizados (GAD). El economista Pablo Lucio Paredes le dijo a GK en noviembre de 2021 que estas alianzas suelen ser necesarias cuando el Estado no tiene recursos para invertir en las obras públicas.

Lasso dijo que con estos esquemas se espera construir  las carreteras Tababela-Cusubamba y Chongón-Santa Elena. Entre 2022 e inicios de 2023, prometió el Presidente, será convocado el proceso de alianza público privada del corredor Loja-Catamayo. 

Esta obra tomaría, según el Ministerio de Transporte y Obras Públicas, tres años en ser construida. Tendría una longitud de más de 34 kilómetros y generaría 750 empleos “directos, indirectos e inducidos”. “Esta carretera necesita un carril más hace 20 años; se pudo hacer hace 15”, dice Gilberto Roa, constructor de carreteras lojano. “La necesidad del tráfico es ahora de 4 carriles”, explica Roa. 

En su discurso de informe a la Nación, el Presidente dijo que se harán también las vías de Montecristi-La Cadena y Manta-Quevedo. 

El proyecto de Montecristi-La Cadena, en la provincia de Manabí, tendría más de 103 kilómetros de largo y tardaría 3 años en completarse. Con este proyecto se espera crear 1000 puestos de trabajo.

El de Manta-Quevedo, sostuvo el Ministerio, sería de 192 kilómetros. Tomaría 3 años y pretende generar 1200 empleos. 

Además de estos tres proyectos, el tren multipropósito anunciado por Lasso el 24 de mayo de 2022 se haría mediante una alianza público privada. 

El tren multipropósito tendría una extensión de 965 kilómetros. Uniría al país desde San Lorenzo, en la provincia norteña de Esmeraldas, hasta Cuenca, en el extremo sur del Ecuador. La construcción del tren multipropósito significaría una inversión de 2.5000 millones de dólares, según el Ministerio de Transporte y Obras Públicas. 

El presidente Guillermo Lasso durante la rendición de su primer informe a la nación. Fotografía tomada del Flickr de la Asamblea Nacional.

Otros proyectos que estarían incluidos en el plan vial 2025 son la concesión del corredor vial Buena Fe-Babahoyo-Jujan, que conecta uno de los ejes productivos agropecuarios más importantes del Ecuador. 

También, dijo el Ministerio, se está estructurando el Viaducto Sur Guayaquil, también conocido como el Quinto Puente Durán Guayaquil. Esta obra, dijo Lasso en su informe a la Nación, tiene el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Según la información entregada por el Ministerio, la obra tomaría cuatro años, tendría 41,5 kilómetros de largo y crearía 7.500 empleos “directos, indirectos e inducidos”.