Jorge Glas Espinel nació en la ciudad de Guayaquil, capital de la provincia portuaria de Guayas, en septiembre de 1969. Estudió en el Colegio Cristóbal Colón donde llegó a unirse a los Boy Scouts de Guayaquil. Allí como scout, conoció a Rafael Correa, quién dirigía el grupo, —y después se convertiría en Presidente de la República— se volvieron amigos.
OTRAS NOTICIAS
Glas estudió en la Escuela Superior Politécnica del Litoral (ESPOL). Según la Secretaría de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación (Senescyt), Glas tiene una ingeniería en Electricidad y Electrónica. Habría obtenido su título en 2008.
Glas fue vicepresidente del Ecuador desde mayo de 2013 hasta enero de 2018. Ahora está privado de su libertad en la cárcel de Latacunga, en la provincia andina de Cotopaxi, por varios casos relacionados con corrupción durante el gobierno del expresidente Rafael Correa.
Su vida política
La carrera política de Jorge Glas comenzó durante el gobierno de Correa cuando fue nombrado gerente del Fondo de Solidaridad —una institución del Estado que buscaba invertir las ganancias generadas por varias empresas públicas de telefonía y electricidad en proyectos sociales—. El Fondo existió desde 1995, pero fue liquidado bajo la administración de Glas en 2009. Según él, el Fondo era un “ente amorfo que surgió como un tenedor de acciones para un proceso de privatización que nunca se llevó a cabo” y que por eso había que desaparecerlo. La liquidación del Fondo terminó el 31 de enero de 2010, y todos los fondos fueron transferidos al Banco Central del Ecuador. Además, las acciones del Fondo en las empresas eléctricas y telefónicas pasaron a los Ministerios de Electricidad y Telecomunicaciones, respectivamente.
De lunes a jueves, las noticias más improtantes en tu bandeja de entrada.
Suscríbete a La Diaria
De lunes a jueves, las noticias más improtantes en tu bandeja de entrada.
Suscríbete a La Diaria
De lunes a jueves, las noticias más improtantes en tu bandeja de entrada.
Suscríbete a La Diaria
Tras el anuncio de la liquidación del Fondo de Solidaridad, Glas fue nombrado Ministro de Telecomunicaciones y Sociedad de la Información en agosto de 2009. Estuvo en ese cargo menos de un año, hasta abril de 2010 cuando asumió el Ministerio Coordinador de los Sectores Estratégicos que se encargaba de dirigir las políticas y acciones de cinco instituciones estatales:
- El Ministerio de Electricidad y Energía Renovable
- La Secretaría Nacional del Agua
- El Ministerio de Recursos Naturales No Renovables
- El Ministerio de Telecomunicaciones y Sociedad de la Información´
- Y el Ministerio del Ambiente.
En ese cargo, coordinando los ministerios de los sectores estratégicos, Jorge Glas estuvo hasta 2013, cuando participó como candidato a la vicepresidencia del Ecuador con Rafael Correa por el partido Alianza País. En febrero de 2013, el binomio conformado por Correa y Glas ganó las elecciones presidenciales, y Jorge Glas asumió la vicepresidencia del Ecuador.
Glas fue vicepresidente desde el 24 de mayor de 2013 hasta enero de 2018 cuando fue cesado de sus funciones por el entonces presidente Lenín Moreno. Glas acompañó a Correa hasta el final de su gobierno y luego fue reelecto como vicepresidente con Moreno, respaldados por Alianza País, el movimiento que había creado Rafael Correa en 2007.
Tras el triunfo de Lenín Moreno, Alianza País se fue resquebrajando por las diferencias políticas que, cada vez fueron más evidentes y públicas, entre sus dos líderes: Rafael Correa y Lenín Moreno. Correa empezó a criticar públicamente las decisiones de Moreno y él, pronto, respondió. Mientras, en paralelo, los señalamientos en contra de Glas por supuestos actos de corrupción dentro de la trama Odebrecht, iban en aumento.
En los tres meses en que Glas y Moreno llevaban en el poder, su relación se había ido desgastando. El 3 de agosto de 2017, Moreno tomó la decisión de retirarle las funciones a Jorge Glas —según la Constitución, es el Presidente quien delega las funciones que considere, el vicepresidente debe cumplir, sin embargo, no tiene la potestad de destituirlo, por lo tanto, Glas siguió ostentando el cargo de vicepresidente pero sin ninguna función.
Tres semanas después de quedar sin funciones, la Asamblea Nacional decidió autorizar la vinculación de Glas a una investigación que hacía la Fiscalía por el caso Odebrecht. Su propio bloque votó para levantar la inmunidad que, como vicepresidente en funciones, tenía en ese momento, para poder ser investigado. Lo que vendría después era la caída anunciada: la investigación de la fiscalía avanzaría y la fuerza política de Alianza País sería insuficiente para protegerlo.
Dos días antes de entregarse a la Policía Nacional, Glas ofrecería su última rueda de prensa con medios de comunicación. El 2 de octubre de 2017, Glas entró a la cárcel 4 de Quito después de entregarse a la Policía Nacional. Como aún era Vicepresidente de la República llegó a la cárcel escoltado por la seguridad que le correspondía a su cargo. Desde entonces, saldría únicamente a la Corte Nacional de Justicia, al proceso por presunto delito de asociación ilícita por los actos de corrupción de la empresa Odebrecht.
En diciembre, Glas fue sentenciado a seis años y unas semanas después, en enero, perdió su cargo de vicepresidente tras tres meses de haberse ausentado. Fue reemplazado por María Alejandra Vicuña quien estuvo en el cargo durante menos de un año, hasta que renunció. Luego, Vicuña fue sentenciada a un año de prisión por haber cometido el delito de concusión cuando era asambleísta.
Los procesos contra Jorge Glas
El ex vicepresidente Jorge Glas está en prisión desde diciembre de 2017. El primer caso por el que fue sentenciado fue Odebrecht. Pero tiene otras sentencias en su contra. Te explicamos los principales casos en los que Glasa está implicado.
El caso Odebrecht
El 13 de diciembre de 2017, un Tribunal de la Corte Nacional de Justicia (CNJ) sentenció a ocho personas por el caso Odebrecht en Ecuador por el delito de asociación ilícita. Los implicados apelaron la sentencia, pero un Tribunal de Apelación de la Sala Penal de la Corte Nacional negó el recurso en julio de 2018 y ratificó la sentencia. Pero los acusados querían agotar todos los recursos a su favor, y presentaron un recurso de casación. Sin embargo, en octubre de 2019, este fue negado y la sentencia quedó ratificada y ejecutoriada, es decir, en firme.
Entre los sentenciados por el caso estaban Jorge Glas y su tío Ricardo Rivera, quienes fueron sentenciados a seis años de prisión. Según la Fiscalía, Glas y los otros siete sentenciados se asociaron ilícitamente para “atentar contra la propiedad pública” para obtener un beneficio económico en cinco proyectos de la constructora brasileña Odebrecht:
- El poliducto Pascuales–Cuenca
- El trasvase Daule–Vinces
- El proyecto Hidroeléctrico Manduriacu
- La Refinería del Pacífico
- Y el acueducto La Esperanza
Hasta ahora, según el portal digital Primicias, no se ha podido calcular el monto total de perjuicio por el que Ecuador fue afectado con el caso Odebrecht. El diario español El País dice que la trama de corrupción de la empresa brasileña operó en toda América Latina, y que en Ecuador, se estima que los funcionarios del gobierno recibieron pagos por hasta 33,5 millones de dólares entre 2007 y 2016, a cambio de conceder contratos millonarios a Odebrecht.
El caso Sobornos 2012-2016
El caso Sobornos 2012-2016 comenzó como el caso “Arroz Verde”, una investigación publicada el 30 de abril de 2019 por el portal Mil Hojas. La investigación reveló que supuestamente exfuncionarios del gobierno de Correa habían lavado dinero de los aportes voluntarios al movimiento Alianza País desde noviembre de 2013 hasta febrero de 2014. Parte de los aportes habrían venido de empresas privadas, entre las que estaba también Odebrecht.
En mayo de ese año, tras la publicación del portal, la Fiscalía General del Estado abrió una investigación sobre el caso.
Tras la publicación de la investigación, las primeras detenidas fueron Pamela Martínez y Laura Terán —quien trabajaba con Martínez— por su presunta participación en los delitos de asociación ilícita, cohecho y tráfico de influencias. Martínez habría sido asesora del expresidente Rafael Correa. En agosto de 2019, la Fiscalía vinculó a 22 personas más a este caso. Una de las pruebas que se utilizó en el juicio fue un supuesto cuaderno en el que Martínez anotaba montos y personajes relacionados.
Menos de un año después, en abril de 2020, la Corte Nacional de Justicia (CNJ) sentenció a ocho años de prisión a los procesados en el caso. Entre ellos estaban el expresidente Rafael Correa, el ex vicepresidente Jorge Glas, Alexis Mera, exasesor jurídico de la Presidencia, los exministros de Estado, María de los Ángeles Duarte, Vinicio Alvarado, y Viviana Bonilla, y el ex asambleísta Christian Viteri. También fueron procesados algunos empresarios. El delito del que se los acusó fue cohecho, que se comete cuando un funcionario público acepta o solicita algo a cambio de “hacer, omitir, o condicionar” actos dentro de sus funciones.
En julio de 2020, la Corte Nacional de Justicia negó un recurso de apelación que fue interpuesto por los sentenciados. Pero la sentencia no quedó en firme porque los procesados presentaron un último recurso de casación. Sin embargo, meses después, en septiembre, un tribunal de la Corte ratificó la sentencia al negar el recurso de casación. Con esa ratificación, la sentencia de 8 años de prisión quedó en firme, y Glas sumó otra sentencia.
El caso Singue
Otro de los casos emblemáticos en los que se implicó a Jorge Glas fue el caso Singue. Por ese caso, Glas fue sentenciado a otros 8 años en prisión por el delito de peculado. El caso está relacionado con supuestas irregularidades en la firma de un contrato de explotación petrolera en el campo de nombre Singue en la Amazonía ecuatoriana.
Según la Fiscalía General del Estado, la firma irregular del contrato de adjudicación del campo Singue en 2012, perjudicó al país con una tarifa incorrecta del precio por barril de petróleo. En septiembre de 2019, la Fiscalía acusó a Glas, a Carlos Pareja Yannuzzelli, exministro de Hidrocarburos, a Wilson Pástor, exministro de Recursos No Renovables, y otras 12 personas más después de que la Contraloría General del Estado emitiera un informe que señalaba la existencia de ciertas irregularidades en la negociación del campo petrolero al consorcio ecuatoriano Dygoil-Gente Oil Ecuador.
Según el informe que se presentó inicialmente en 2017, las irregularidades del contrato habrían causado al Estado un perjuicio de 5,2 millones de dólares. Sin embargo, de acuerdo a investigaciones de la Fiscalía, el perjuicio real alcanzaría los 28,4 millones de dólares hasta septiembre del 2016.
En la firma del contrato, se estableció “sin sustento técnico ni legal, una tarifa de 33,5 dólares por barril de petróleo”, según la Fiscalía. En 2012, cuando se firmó el contrato, el barril de petróleo oscilaba entre los 90 y 100 dólares. Además, el entonces Subsecretario de Estudios y Patrimonio Hidrocarburífero había estimado que en 20 años se extraerían 2 millones de barriles de petróleo de ese campo. Pero solo tres años después de iniciada la explotación, Dygoil-Gente Oil ya había extraído 4,7 millones de barriles. La sentencia por este caso aún no está ejecutoriada porque está en proceso de apelación.
En medio de la peor crisis carcelaria que vive el país, Jorge Glas solicitó la unificación de penas — una recurso legal que permite que un sentenciado cumpla la pena más alta a la que fue sentenciado en lugar de todas sumadas— pero fue negada.
La solicitud se negó porque la sentencia por el caso Singue aún no está ejecutoriada. De haber sido aceptada su solicitud, el ex vicepresidente hubiese podido presentar una solicitud para acceder a la prelibertad —un beneficio penitenciario en el que una persona presa concluye su sentencia en libertad— bajo ciertas condiciones, ya que ya ha cumplido con el 40% de su sentencia por el caso Sobornos (por el que tiene la sentencia más alta).
¿Qué se sabe de Jorge Glas ahora?
Jorge Glas tiene una cuenta de Twitter que, según su descripción, “es administrada por amigos”. Allí, de vez en cuando, publican información sobre el ex vicepresidente. Una de las últimas publicaciones en la cuenta es un retuit de Manuel Pineda, Secretario del Área Internacional del Partido Comunista de España. En ese tuit, Pineda publicó la foto de una carta que envió a Bernarda Ordóñez, Secretaria de Derechos Humanos del gobierno de Guillermo Lasso, en la que solicita que le permitan acceder a Glas a sus beneficios penitenciarios. La carta dice que el partido de izquierda del Parlamento Europeo ha tenido acceso a exámenes médicos y psicológicos de Glas en los que se evidencia su “deteriorado” estado de salud. Además, dice la carta, existe “cierta negligencia en cuanto a la atención médica” que requiere Glas y por eso están “extremadamente preocupados” por su vida.
En enero de este año, Jorge Glas dio positivo para covid-19. En un principio, había rumores de que el estado de salud del ex vicepresidente era tan malo que había sido trasladado a Quito. Sin embargo el Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores del Ecuador (SNAI) desmintió los rumores. Nunca se supo qué tan grave fue el cuadro de covid-19 que experimentó Glas. Sus amigos no informaron sobre su condición en su cuenta de Twitter.
Tras la aprobación de la ley Orgánica para el Desarrollo Económico y Sostenibilidad Fiscal tras la Pandemia COVID-19 por el ministerio de la ley el pasado 26 de noviembre, Enrique Jara, militante del correísmo, dijo en Twitter que “los que dicen ser revolucionarios deben saber que la persecución y la cárcel son parte del camino. JAMÁS se puede sacrificar a la mayoría en nombre de los costos de defender a militantes”. El expresidente Correa le respondió el tuit. Le dijo: “¿cuántas veces has visitado a Jorge Glas? ¿Te has puesto en sus zapatos? ¡Qué fácil es decir ciertas cosas!”