En lo que va del 2021, al menos 320 personas han sido asesinadas en las cárceles del país. Una de las causas principales de las masacres, coinciden los expertos, es la disputa de las bandas criminales por el liderazgo en los centros penitenciarios, que escaló a finales de 2020 cuando Jorge Luis Zambrano, líder máximo de Los Choneros, fue asesinado en Manta. 

¿Quién es Jorge Luis Zambrano?

Jorge Luis Zambrano, conocido por sus colegas como “JL” y por la Policía como “alias Rasquiña”, fue uno de los grandes líderes de Los Choneros, una de las bandas más temidas del Ecuador. 

Asumió uno de los liderazgos de la banda después de que su fundador, Jorge Bismarck Véliz España, “alias teniente España”, fuera asesinado en enero de 2007, tras un enfrentamiento con Los Queseros —una banda delictiva que al igual que Los Choneros, traficaba drogas desde Manta. 

Antes de ser el único líder de la banda, Rasquiña era considerado la mano derecha de Jairón Proaño, otro de los jefes de Los Choneros. 

Desde mediados de los 2000, Zambrano tenía antecedentes por delitos como asesinatos, extorsión y narcotráfico. Además, según el Ministerio del Interior —hoy, Ministerio de Gobierno—, Zambrano también era parte de grandes organizaciones y carteles que operaban en México y Colombia. 

Rasquiña fue asesinado a los 39 años de edad, la tarde del 28 de diciembre de 2020 en una cafetería dentro del Mall del Pacífico, en la ciudad costera de Manta, donde vivía bajo libertad condicional, después de haber accedido a la prelibertad. 

Las sentencias de Rasquiña

Zambrano estuvo detenido desde el 7 de septiembre de 2011 hasta el 6 de junio de 2020 por el delito de asesinato. En un inicio, Rasquiña fue sentenciado a ocho años de prisión por el Tribunal de Garantías Penales de la ciudad costera de Manta, como cómplice de asesinato. 

Más tarde, la Fiscalía apeló la sentencia y la Sala de lo Penal de la Corte Provincial de Manabí no solo la ratificó, sino que además modificó el grado de participación de Rasquiña en el delito y pasó de ser cómplice a coautor. Por ese cambio, Jorge Luis Zambrano fue sentenciado a cumplir veinte años en prisión. Luego, Zambrano presentó un recurso de casación, pero fue rechazado por la Corte. 

En 2019, cuando ya había cumplido ocho años de su condena, Rasquiña presentó un recurso de garantías penitenciarias —por el cual se revisa que se hayan cumplido los derechos de las personas privadas de la libertad en el proceso de rehabilitación social. El proceso llegó a las manos del Juez José Tamayo y él cambió la pena de Zambrano de veinte a ocho años. 

Según el juez, en el proceso judicial contra el líder de Los Choneros por el delito de asesinato, se vulneró el principio de “congruencia” —que es la relación de pertinencia entre el delito imputado y el delito juzgado. El medio Plan V dice que Tamayo consideró que los jueces del Tribunal de Garantías Penales, de la Sala de lo Penal y de la Corte Nacional “incurrieron en una mala aplicación de la norma vigente”. 

Finalmente, Tamayo redujo la pena de Zambrano de veinte a ocho años. Y un año después, mientras cumplía su sentencia en la cárcel de Latacunga, en la provincia andina de Cotopaxi, Rasquiña ingresó un pedido de prelibertad. 

En base a la reducción de la pena, en junio de 2020, la jueza Alzira Benítez de la Unidad Judicial Penal de Latacunga, le concedió el pedido de prelibertad argumentando que el líder de Los Choneros ya había cumplido su sentencia. Tras su liberación, Zambrano fue a Manta —ciudad donde tenía que vivir con libertad condicional hasta cumplir la totalidad de sus condenas por otros delitos como la tenencia de armas, lesiones, y tráfico de drogas.

Por modificar la sentencia que permitió que Rasquiña saliera de prisión antes de tiempo, el presidente de la Corte de Justicia del Guayas, dictó prisión preventiva contra Tamayo por el presunto delito de prevaricato. El Código Orgánico Integral Penal (COIP) dice que el prevaricato es cuando un juez dicta una sentencia arbitraria sabiendo que es contraria a la ley. Se sanciona con prisión de tres a cinco años. 

El juez también fue destituido por el Consejo de la Judicatura en febrero de 2020. 

¿Dónde estaba detenido Rasquiña?

En un principio, Jorge Luis Zambrano estuvo detenido en La Roca, una cárcel de máxima seguridad en las afueras de la ciudad de Guayaquil que fue cerrada en 2013 por órdenes del entonces presidente Rafael Correa. Fue cerrada después de que un grupo de 18 personas que estaban privadas de la libertad en ese centro se escaparan en febrero de ese mismo año. 

Entre las personas que se fugaron en esa ocasión estaban Rasquiña y al menos otros 20 miembros de Los Choneros. Todos fueron recapturados, pero el último en ser encontrado fue precisamente Zambrano. El líder de Los Choneros fue encontrado en Colombia en noviembre de 2013, nueve meses después de la fuga, y fue trasladado de vuelta a Ecuador.

Como La Roca ya estaba cerrada, tras su recaptura, Rasquiña fue llevado a la cárcel de Latacunga, para que continúe cumpliendo su condena.

Rasquiña estuvo allí hasta que le concedieron el pedido de prelibertad en junio de 2020. 

¿Quiénes son Los Choneros?

La banda de Los Choneros se dedica al narcotráfico, el sicariato y otros delitos. Apareció a finales de los 90 en Chone, una ciudad ubicada entre el norte y el centro de la provincia de Manabí. Uno de sus precursores fue Jorge Véliz España, alias ‘teniente España’. 

La banda inició con delitos comunes como extorsión, robo, y asaltos. Sin embargo, con el tiempo escaló al narcotráfico y se convirtió en una de las organizaciones delictivas más temidas y estructuradas del país.

Tras el asesinato de Rasquiña, el liderazgo de los Choneros fue asumido por alias Fito y alias Junior, colegas y hombres cercanos de él. Tanto Fito como Junior están detenidos en la cárcel Regional del Guayas, desde donde a pesar de estar privados de su libertad, continúan manejando la estructura de Los Choneros. 

La crisis carcelaria y su relación con Rasquiña

Desde hace varios años, Ecuador vive una fuerte crisis carcelaria a nivel nacional que ha ido en incremento desde enero de 2019 y no se detiene. Tras la muerte de Rasquiña, de hecho, se ha intensificado. Las autoridades creen que se debe a que tras la muerte del líder de Los Choneros,  otras bandas delictivas —Los Lobos, Los Tiguerones, Los Chone Killers, Los Lagartos— están intentando tomar el control de los centros de privación de libertad. 

Tras la muerte de Rasquiña, en lo que va de 2021, más de 320 personas han sido asesinadas en cuatro masacres en las cárceles del país —en febrero, julio, septiembre y noviembre—.

La masacre más violenta sucedió a finales de septiembre en la Penitenciaría del Litoral y dejó como saldo 119 personas privadas de la libertad fallecidas. De ellas, dijo la Secretaria de Derechos Humanos, Bernarda Ordóñez, en una entrevista con GK, el 75% no tenía sentencia y el 61,3% «no tenía ni 30 años». 

La última masacre, en cambio, dejó 62 muertos y también sucedió en la Penitenciaría del Litoral. Esta vez, la masacre fue alertada por los mismos privados de la libertad a través de una transmisión en vivo. En la transmisión, los presos pedían la intervención de las autoridades y alertaban que las muertes serían responsabilidad del Estado porque pasaban horas y nadie hacía nada.