La masacre carcelaria del 12 de noviembre de 2024, explicada

La madrugada del 12 de noviembre de 2024, una masacre en la Penitenciaría del Litoral, en la ciudad portuaria de Guayaquil, dejó 15 personas fallecidas y 14 heridas, según dijo el Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores (SNAI). La masacre carcelaria del 12 de noviembre de 2024  es la primera de este año y la primera durante el gobierno de Daniel Noboa. La Penitenciaría es la cárcel más violenta del país desde 2021.

Desde que asumió el poder, el Presidente ha intentado tomar el control de las cárceles declarando un conflicto armado interno y a los grupos narcoterroristas como objetivos militares y renovando constantemente los estados de excepción para enfrentar la crisis de seguridad. 

A las 9 y media de la mañana del 12 de noviembre, el SNAI publicó un comunicado que decía que en un pabellón de la Penitenciaría hubo “graves incidentes entre personas privadas de libertad” dejando 15 fallecidos y 14 heridos.

A esa hora, la cárcel estaba bajo control absoluto, según la institución. 

Diez minutos después del reporte del SNAI, la Fiscalía publicó en su cuenta de X que abrió una investigación previa por la muerte de 9 personas durante los enfrentamientos que ocurrieron en la madrugada. 52 minutos después contestaron a ese hilo en X diciendo que el número de los fallecidos subió a 15.

Quince minutos después, la Fiscalía dijo que formularán cargos contra nueve personas privadas de libertad por su presunta participación en el delito de asesinato. 

Al día siguiente, el 13 de noviembre de 2024, el SNAI confirmó que el número de fallecidos en la masacre ascendió a 17, y el de heridos a 15 personas. También dijo que habilitó la línea telefónica (04) 2592450 para atender y dar información a los familiares de los presos.

Las visitas familiares y sociales están suspendidas en la Penitenciaría. 

La Fiscalía, por su parte, dio más detalles sobre los procesados y presuntos responsables del enfrentamiento, como los nombres, sin apellidos.

Además, dijo que se investiga la posible participación de otros reclusos de la Penitenciaría.

La masacre se dio en el pabellón 3 alrededor de las cuatro de la madrugada cuando se escucharon disparos y los familiares de los detenidos recibieron llamadas de alerta. 

La esposa de una de las personas asesinadas, que no reveló su identidad, le dijo al canal Teleamazonas que hace dos días, su esposo le contó que los iban a matar. Otro familiar se quejó del control que ejercen las Fuerzas de control en el centro de privación: “Se supone que tiene que estar cuidados, y controlados, y nos engañan todos los días”, dijo. 

Los enfrentamientos duraron al menos dos horas. En imágenes aéreas de la agencia francesa de prensa AFP se observa a cuatro personas vestidas por completo de color naranja sacar un cuerpo que apilan junto a otros, en uno de los patios de la Penitenciaría. 

Hasta el cierre de esta nota, ni Fuerzas Armadas, ni la ministra del interior Mónica Palencia, ni el presidente Daniel Noboa se pronunciaron al respecto. 

Los múltiples estados de excepción

El 3 de octubre de 2024, el gobierno de Noboa decretó un nuevo estado de excepción —el sexto desde que Daniel Noboa asumió la Presidencia— con toque de queda en varias provincias por, entre otras cosas, la intensa presencia de grupos armados organizados. 

La medida, que se tomó por 60 días, afecta a las siete provincias del decreto de mayo: Guayas, Los Ríos, Manabí, Orellana, Santa Elena, El Oro, y Ponce Enríquez en Azuay, y ahora también incluye el Distrito Metropolitano de Quito. 

La justificación para esta medida, similar a las anteriores, fue la “grave conmoción interna y conflicto armado interno”, con el fin de reforzar la seguridad con las Fuerzas Armadas y la Policía. 

Este último decreto se basó en un informe con 70 casos de violencia y otros documentos del Ministerio del Interior y la Policía Nacional.

Uno de los informes citados en el decreto de estado de excepción señala que, a pesar de las operaciones de las Fuerzas Armadas, los niveles de violencia y criminalidad en Ecuador siguen siendo altos. También que los grupos armados organizados han fortalecido sus alianzas y capacidades. 

Un informe detalla que entre enero y septiembre de 2024, se registraron más de 500 homicidios, incluyendo asesinatos masivos, con 109 víctimas “colaterales”. 

Uno de los datos más alarmantes es que se detuvieron a menores de edad involucrados en delitos graves, como tráfico de drogas y posesión de armas. 

En este decreto se aclara que Ecuador ha dejado de ser solo un país de tránsito para el narcotráfico y se ha convertido en un actor clave en la cadena de distribución. 

El decreto también destaca el asesinato de 27 miembros de la Fuerza Pública entre enero y septiembre de 2024. 

En las 50 páginas del decreto de estado de excepción de octubre de 2024 también se cita un informe del Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores (SNAI) del 30 de septiembre de 2024 que concluye que los estados de excepción contribuyeron a garantizar “el control y la seguridad” en los Centros de Privación de Libertad gracias al apoyo de la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas. 

Las masacres carcelarias 

A pesar de que esta es la primera masacre carcelaria en el 2024 en el país, el término no es aislado para los ecuatorianos. Entre febrero de 2021 y julio de 2023 hubo al menos 500 personas privadas de la libertad asesinadas en varias masacres carcelarias en Ecuador. Y hasta julio de 2023 no había un responsable directo por aquellas muertes.

La mayoría fueron adjudicadas a enfrentamientos entre bandas criminales. 

Antes de que las masacres ocurrieran hubo alertas y pedidos de auxilio de los internos, que no fueron escuchados por las autoridades. Una de ellas la de Yolkin, un joven que intentaba superar una adicción a las drogas y fue asesinado el 28 de septiembre de 2021 en la Penitenciaría del Litoral, la cárcel más violenta de Ecuador. 

En el 2021 hubo cuatro masacres carcelarias que dejaron varios muertos. La primera fue el 23 de febrero cuando en la madrugada de ese día decenas de personas presas pedían auxilio a sus familias desde la cárcel regional de Guayas, la Penitenciaría del Litoral, la cárcel de Turi, en Cuenca; y en la cárcel de Latacunga. La masacre dejó al menos 81 muertos y las bandas que estuvieron involucradas fueron Los Lobos, Los Chone Killers, Los Tiguerones y Los Pipos. 

La segunda masacre de ese año fue el 21 de julio cuando las bandas de los pabellones 7 y 8 de la Penitenciaría del Litoral y la cárcel de Latacunga, se enfrentaron. Dejaron al menos 21 muertos. 

La tercera masacre fue el 28 de septiembre por enfrentamientos entre bandas que dejaron al menos 125 personas asesinadas. La cuarta masacre fue entre el 12 y 13 de noviembre y dejó 56 muertos. 

En el 2022, en cambio, hubo siete masacres carcelarias: La del 3 de abril dejó 20 muertos en la cárcel de Turi en Cuenca donde se enfrentaron las bandas de Los Lobos y los R7. En la del 9 de mayo, en el Centro de Rehabilitación Bellavista, en la provincia de Santo Domingo de los Tsáchilas, murieron al menos 44 personas y se fugaron más de 200 presos. 

En la del 18 de julio, del Centro de Rehabilitación Social, en Santo Domingo, al menos 12 personas fueron asesinadas. 

En octubre de ese año hubo dos masacres, la del 3 de octubre que dejó al menos 15 muertos y 21 heridos en el Centro de Rehabilitación Social de Cotopaxi, conocida como la cárcel de Latacunga. La masacre se originó tras el ataque y asesinato del narcotraficandte Leandro Norero conocido como El Patrón. Y a del 5 de octubre que dejó 13 muertos en la Penitenciaría del Litoral. 

En noviembre de ese año también hubo dos masacres. La primera, el 7 de noviembre dejó cinco muertos en la cárcel del Inca en el norte de Quito y la segunda, el 18 de noviembre dejó al menos 10 muertos en la misma cárcel. 

Finalmente, en el 2023 hubo tres masacres carcelarias. La primera, fue el 14 de abril por un enfrentamiento entre los pabellones 3, 5, 8 y 9 de la Penitenciaría del Litoral y dejó 12 muertos y al menos 3 heridos. 

La segunda fue de tres días del 22, 23, 24 de julio y se enfrentaron varios grupos delincuenciales en el Centro de Privación de Libertad Guayas No 1, en Guayaquil y dejó 18 personas muertas y 11 heridos. En la masacre de julio también hubo 96 guías penitenciarios detenidos en cinco cárceles del país y fueron liberados varios días después. 

En septiembre de 2023, Ecuador ocupó el décimo puesto en el top 10 de los países con mayor índice de criminalidad del mundo en el Informe Global Contra el Crimen Organizado Transnacional 2023 (Gitoc, por sus siglas en inglés). 

Según ese informe, Ecuador también está en el cuarto puesto de los 35 países americanos con mayor índice de criminalidad y tercero entre los 12 países sudamericanos.