Usar 2.500 millones de las reservas internacionales, ¿es viable?

A lo largo de su campaña electoral, Luisa González, candidata a la presidencia de la Revolución Ciudadana, ha dicho que uno de sus planes es usar 2.500 millones de dólares de las reservas internacionales para introducirlos en la economía del país. Sin embargo, según expertos, esa propuesta pondría en riesgo la economía del Ecuador. 

¿Qué son las reservas internacionales y por qué son importantes?

Las reservas internacionales son recursos de libre disponibilidad que pueden ser utilizados en caso de una emergencia para fortalecer el poder adquisitivo de un país. “Como su nombre lo indica, están reservadas en caso de una emergencia”, dice el analista económico Victor Hugo Albán. 

Según el Banco Central del Ecuador, son los recursos económicos que tiene un país y que son usados para cumplir con los pagos internacionales. Es decir, se usan para importar combustibles, pagar la deuda externa, hacer giros al exterior, entre otras cosas. 

Las reservas internacionales garantizan que haya dinero circulando en el país. Esa es su función más importante. Además, respaldan los depósitos de las instituciones bancarias públicas y privadas en el Banco Central. Por eso, son fundamentales para que la dolarización se mantenga en Ecuador. 

No están conformadas solo por dólares. Una parte de las reservas, la líquida, está en divisas —además del dólar hay varias monedas internacionales fuertes, como el euro o las libras esterlinas— y la otra, la no líquida, en oro y en bonos. 

El oro sirve para fortalecer las reservas de dólares que tiene el Ecuador. En caso de una emergencia, este commodity se puede empeñar a instituciones bancarias internacionales a cambio de dinero en efectivo. Eso sucedió en marzo de 2020, cuando por la pandemia del covid-19 Ecuador obtuvo una línea de liquidez —con plazo de pago de un mes— por 300 millones de dólares a cambio de 140 mil onzas de oro que estaban en la reserva. 

Hasta el 18 de marzo de 2023, las reservas internacionales de Ecuador eran de 6.911 millones de dólares, según el Banco Central del Ecuador. De esas, poco más de 2 mil millones eran oro. En enero de 2023, las reservas superaron los 9.300 dólares, alcanzando su máximo nivel desde la dolarización. 

Las reservas se usan, también, para el cálculo del riesgo país, un índice que, entre más alto es representa una mayor posibilidad de que un país no pague sus deudas. Entre menos reservas, mayor es el riesgo. 

Incluso con las reservas en los niveles más altos en décadas, el riesgo país de Ecuador es alto. El 3 de agosto de 2023, el riesgo país llegó a 2.035 puntos, el nivel más alto desde que comenzó el gobierno de Guillermo Lasso. Según Víctor Hugo Albán, declaraciones como las de Luisa González sobre sacar dinero de las reservas podrían incrementar el riesgo país, lo que complicaría todavía más el acceso a créditos e inversión en el país. 

¿Cuál es la propuesta de Luisa González y por qué es riesgosa?

La candidata de la Revolución Ciudadana dijo en una entrevista con Reuters que traerá “2.500 millones de dólares para inyectar en la economía nacional”. Según ella, es dinero “que está guardado sin ganar un centavo” y que solo sirve para garantizar los pagos a los tenedores de bonos. 

Luisa González pasó a segunda vuelta. Con su binomio, Andrés Arauz, dieron una rueda de prensa que más parecía un evento de campaña, la noche del 20 de agosto de 2023. Fotografía de Vanessa Terán Collantes para GK.

González dijo que aproximadamente 500 millones de ese dinero se usaría para financiar armamento y vehículos para la Policía. El resto iría en partes iguales para salud, educación, préstamos para las pequeñas empresas e infraestructura. 

Según Víctor Hugo Albán, el usar dinero de las reservas internacionales “nos dejaría desfasados porque son una garantía y aval del sistema bancario”.  Las reservas son fundamentales para garantizar pagos, efectivo circulante en el país y dar garantías internacionales, por eso, dice Albán, no se puede hablar de que es “un dinero ocioso”. 

El 24 de agosto, la Corporación de Estudios para el Desarrollo (Cordes) —institución privada sin fines de lucro creada para promover estudios académicos sobre los problemas que afectan el desarrollo de los países latinoamericanos— publicó un análisis sobre la propuesta de González. Según Cordes, la candidata plantea esto “tal vez desconociendo el funcionamiento de las reservas internacionales y su sensible reducción en los últimos meses”. 

Víctor Hugo Albán dice que González podría usar el 20% de las reservas que corresponden al gobierno central. El resto del porcentaje es del sistema bancario y de los gobiernos autónomos descentralizados. Sin embargo, aunque use solo ese porcentaje podría tener consecuencias graves para la economía del país. 

Cordes recuerda que, en la actualidad, el dinero del Tesoro Nacional, controlado por el gobierno central, es de apenas 495 millones. Así que si González planea usar más dinero, ese correspondería a otros depositantes del Banco Central, como bancos privados y cooperativas. 

Sobre cuánto se reducirían las reservas, el análisis de Cordes dice que eso depende del uso que se le dé al dinero. Si se los usa, por ejemplo, para pagar las deudas con los GAD o con la seguridad social, el dinero “solo estaría cambiando de un bolsillo a otro”, dice el análisis. Ya que los recursos vuelven al Banco Central y no saldrían del país. 

En cambio, si se usan para importar armas y municiones, como dice la propuesta de González, el dinero saldría por completo de las reservas. Por ende, los activos líquidos, que según Cordes ya son insuficientes en la actualidad, se deterioriarían todavía más. 

Victor Hugo Albán dice que es importante no tocar la reserva porque ese dinero solo debe ser usado “en caso de emergencia” ya sea bancaria, local, nacional o internacional. Pone como ejemplo lo que pasó con la pandemia del covid-19 en 2020 o lo que podría pasar con el fenómeno de El Niño en las provincias de la Costa. Según él, las propuestas como la de González, vienen desde la “ignorancia y demagogia”. El dinero de las reservas, dice, en una democracia “no puede ser usado a gusto y satisfacción del gobierno”.  

En las elecciones de 2023, Luisa González obtuvo el 33,63% de los votos. Ella y Daniel Noboa, candidato de la Alianza ADN y quien obtuvo el 23,43% de los votos, pasan a segunda vuelta. El próximo 15 de octubre los ecuatorianos irán a las urnas otra vez para decidir quién es el próximo Presidente de la República.