En una breve intervención, el Presidente de la República, Guillermo Lasso, se dirigió al país en el duodécimo día del paro nacional.
Lasso dijo que ayer había llegado a acuerdos con emisarios de Iza, presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), que lidera el paro.“Sin embargo, la violencia del día de ayer, la información que hemos recibido hoy, así como sus declaraciones públicas, evidencian que la intención real del señor Iza es el derrocamiento del gobierno.”
OTRAS NOTICIAS
Además, dijo Lasso, estaba “claro que Leonidas Iza nunca quiso resolver una agenda en beneficio de los pueblos y nacionalidades indígenas”. Lo único que buscaba, aseveró el Presidente de la República, era “engañar a sus bases y usurpar el gobierno legalmente constituido”.
Ecuador vive el duodécimo día de paro nacional. En las últimas 48 horas, la violencia ha recrudecido: cientos de manifestantes se enfrentan con armas de fuego, objetos cortopunzantes y explosivos a la policía y los militares que los repelen con gases lacrimógenos y balas de goma.
El jueves 23 de junio de 2022, una pequeña esperanza había emergido en medio del plomo de la violencia. El Ministro de Gobierno, Francisco Jiménez, anunció que el gobierno dispondría la desmilitarización del parque de El Arbolito y la Casa de la Cultura Ecuatorianafy. Este era uno de los pedidos hechos por Leonidas Iza para iniciar un proceso de diálogo entre la Conaie y el gobierno de Lasso.
“Como muestra de apertura al diálogo y en búsqueda de la paz ciudadana, se permitió que, en el Ágora de la Casa de la Cultura, la Conaie pudiera convocarse en asamblea”, dijo en su intervención Lasso. Aseguró, también, que desde la 1 de la tarde de ese día, se mantuvieron conversaciones con varios delegados del Leonidas Iza.
Pero tras el anuncio de Jiménez, hubo nuevos enfrentamientos entre la Policía y los manifestantes. En los enfrentamientos murió un joven por fuego de perdigones en el parque El Arbolito En la noche, un piquete militar fue violentamente emboscado por un grupo de manifestantes en San Antonio de Pichincha, cerca de la mitad del mundo, en el norte de Quito.
Esto ocurrió después de que un grupo de militares llegara hasta la zona para despejarla y permitir el paso de alimentos. Hubo 17 militares heridos de gravedad, 3 camiones, un camión plataforma y una retroexcavadora destruidos, según el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas.
Lasso dijo, además, que Iza ha demostrado que “ya no puede controlar la situación”. Habló, además de la “infiltración” de “grupos de vándalos, que también buscan desestabilizar la democracia sembrando el terror”, igual que en el paro de octubre de 2019. “La violencia de perpetrada por criminales infiltrados se le fue de las manos” a Iza, dijo Lasso.
La mañana del 24 de junio, los asambleístas del correísmo agrupados en la coalición Unión por la Esperanza (UNES) anunciaron que iniciarán un proceso para convocar a la muerte cruzada —mecanismo constitucional para que la Asamblea, con 91 votos, destituya al Presidente de la República por “grave conmoción social” y se convoque a elecciones. Pero sus intentos no prosperaron.
La Izquierda Democrática, el movimiento Pachakutik y el Partido Social Cristiano descartaron firmar tal pedido. Para que se activase, se requerían 91 votos de los 137 asambleístas que tiene el desprestigiado legislativo ecuatoriano.
“Valoramos el compromiso de la Izquierda Democrática, el Partido Social Cristiano, la Bancada del Acuerdo Nacional y los asambleístas que públicamente se han manifestado en favor del orden constituido”, dijo Lasso en su breve intervención.
También dijo que “la intención verdadera de los violentos es generar un golpe de Estado”. Hizo un llamado a la comunidad internacional para advertir de lo que llamó un “intento de desestabilizar la democracia”.
Además, advirtió que “el gobierno nacional utilizará todos los recursos que la ley le faculta para enfrentar a los vándalos y criminales”. Dijo que “la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas actuarán con los medios necesarios para defender, dentro del marco legal, mediante el uso progresivo de la fuerza, el orden público y la democracia”.
Lasso convocó a las organizaciones de derechos humanos a mantenerse “supervisando este proceso que ha vulnerado los derechos de los miembros de nuestras fuerzas públicas, ciudadanos y periodistas.” Hasta la noche del 23 de junio, Fundamedios había reportado 86 agresiones a periodistas y medios de comunicación.
Además, durante los doce días de protestas ha habido al menos cinco muertos durante de las manifestaciones y dos personas que murieron cuando sus ambulancias no pudieron llegar al hospital pues las carreteras estaban cerradas por las movilizaciones.
Lasso también se dirigió a los manifestantes indígenas que pernoctan en distintos centros de paz. Pidió a los manifestantes “indígenas y campesinos que han sido traídos a Quito con engaños” que regresen a sus comunidades “por su seguridad”. Insistió que el gobierno está comprometido en “atender directamente, en sus comunidades, todas sus causas históricas”. Dijo, además, que varios dirigentes de comunidades ya se han puesto en contacto con el gobierno para presentar sus necesidades directamente.
El presidente Lasso afirmó que cientos de miles de ciudadanos han demostrado “su defensa en favor de la paz y su derecho a prosperar”. Lasso aseveró que Iza no tiene “control de las manifestaciones ni de la criminalidad que sus acciones irresponsables han generado”.
Lasso insistió en que el gobierno ha dado “todos los pasos necesarios para insistir en el diálogo” y que se mantiene abierto a continuar haciéndolo.
Varias organizaciones se han ofrecido a mediar en un posible diálogo entre el gobierno nacional y la Conaie para dar por terminadas las manifestaciones. La Conferencia Episcopal Ecuatoriana es una de esas instituciones.
En una rueda de prensa su presidente, monseñor Luis Cabrera, acompañado por las máximas autoridades de la Confederación, hizo un llamado a la paz y ratificó el llamado a que ambas partes, “deponiendo cualquier posición extrema, se sienten a dialogar”.
Hasta ahora, el presidente de la Conaie, Leonidas Iza, no ha reaccionado al discurso de Lasso.