El proceso de reclutamiento y selección de agentes de seguridad penitenciaria para las 37 cárceles ecuatorianas y 10 centros de detención para adolescentes arrancó hoy. La promesa del Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Privadas de la Libertad y Adolescentes Infractores (SNAI) y la Policía Nacional es cubrir el déficit del 70% de guías carcelarios formando a 1400 agentes quienes se incorporarán a los turnos de trabajo en los centros penitenciarios. 

En una sala pequeña de la Comandancía de la Policía Nacional, poblada de carteles con el clásico logo de cóndor gris de la institución, el coronel Patricio Sarabia, director nacional de Educación de la Policía —la institución que es la nueva corresponsable de la convocatoria para elegir a los postulantes—, aseguró que su departamento se sumó a la logística del reclutamiento para “fortalecer la seguridad ciudadana”. Hasta hace un año, el SNAI era quién se encargaba exclusivamente de la selección, pero para esta convocatoria acudió a la policía como su compañera de fortalecimiento, pese a los amplios cuestionamientos de académicos, ex funcionarios penitenciarios y organizaciones de derechos humanos sobre la influencia de la institución en el sistema carcelario.  

Sarabia aseguró que el proceso de formación de los guías penitenciarios será amplio, “alineado al respeto de la ley y la observancia de los derechos humanos”. Francisco Guzmán, responsable del régimen de carrera del SNAI, dijo que era un “momento histórico” en la institución porque implica una adecuación de los recursos humanos, que se concretará en al menos un año, pues solo ocho meses serán destinados a su preparación. 

¿Quiénes pueden postular? 

Pueden postular personas con los siguientes requisitos:

• Tener nacionalidad ecuatoriana.
• Tener cédula de ciudadanía y certificado de votación.
• Tener entre 18 y 28 años de edad. 
• Tener título de bachiller o acta de grado certificados.
• No tener impedimentos para ejercer un cargo público, según el certificado emitido por el Ministerio de Trabajo.
• Tener el historial penal limpio, sin antecedentes penales. 
• Medir mínimo 1,68 metros, para los aspirantes hombres. En cambio, las aspirantes mujeres deben medir desde 1,57 metros. 
• No tener dos o más deudas de pensiones alimenticias, tampoco haber recibido una sentencia ejecutoriada por casos de violencia intrafamiliar.
• No haber recibido la baja o destitución de las Fuerzas Armadas, la Policía Nacional u otras entidades de seguridad de la función ejecutiva o de gobiernos autónomos.

¿Cuáles son las fases del proceso de selección? 

La convocatoria, que comienza hoy, culminará cuando se hagan las pruebas de confianza a los potenciales candidatos. Así será el proceso: 

• Convocatoria: 12, 13 y 14 de abril en medios de comunicación y redes sociales.

• Registro: 15 y 16 de abril, a través de la página https://reclutamiento.policia.gob.ec, la misma que usa la Policía para el reclutamiento de agentes policiales. Esa página será activada el 15 de abril. En el portal web, el postulante deberá ingresar su correo electrónico y su cédula de identidad. El sistema le mostrará su nombre, pues está anclado al del Registro Civil. De esa manera, podrá ingresar y comenzar su postulación.

Después, la Policía y el SNAI lo contactarán para otras fases del proceso, cuyas fechas aún no fueron especificadas. Los procesos son:

• verificación de estatura
• prueba académica
• prueba psicológica
• análisis de verificación de documentos
• acreditación en línea
• pruebas físicas
• evaluación médica odontológica
• pruebas de confianza. 

Estas últimas evaluaciones incluyen un análisis toxicológico para detectar si existe consumo de drogas. 

¿Cuánto ganarán los nuevos agentes de seguridad? 

Después de un proceso de formación de ocho meses en instalaciones de la Policía Nacional, los guías serán agentes de seguridad penitenciaria grado 3 y ganarán 813, 40 dólares. 

Francisco Guzmán, responsable del régimen de carrera del SNAI, aseguró que se han establecido convenios para fortalecer la formación de los agentes, que ha sido señalado por expertos como el talón de aquiles del sistema carcelario. En noviembre de 2021, GK entrevistó a Carlos*, un guía de la Penitenciaría del Litoral de Guayaquil, que cuestionó la teoría con la que fue formado y la falta de práctica para el manejo de personas privadas de la libertad. Dijo, además, que varios de sus compañeros se han unido incluso a las megabandas carcelarias. Por ejemplo, el líder de la banda narcodelictiva Los Tiguerones es liderada actualmente por alias Negro Willy, quien alguna vez custodiaba los pabellones de prisión. 

Guzmán no anunció cuáles son las medidas, protocolos o programas con los que se trabajará temas de prevención para evitar la corrupción de agentes penitenciarios, o cómo fortalecerán su seguridad. En la misma entrevista a GK, el guía penitenciario se quejó de esta falta de protección diciendo que “solo trabajan con el valor de cada uno”. Lo que sí dijo Guzmán es que firmaron un acuerdo con PAcCto, el Programa de Asistencia contra el Crimen Transnacional Organizado de la Unión Europea, para mejorar la capacitación los agentes. Además, aseguró Guzmán, se recibirán “intercambios” de información y capacitación con escuelas penitenciarias de Chile, Portugal y Francia. 

Luego de un “acercamiento” con la Embajada de Estados Unidos, específicamente con la Oficina Internacional de Asistencia Antinarcóticos y Cumplimiento de la Ley,  Guzmán planteó la idea de que varios de los agentes puedan capacitarse en el exterior, aunque no dio más detalles. 

¿Cuál es la situación actual de los agentes penitenciarios en Ecuador? 

El déficit de agentes de seguridad carcelaria es, según varios especialistas, efecto del abandono estructural del sistema penitenciario en Ecuador y uno de los problemas registrados incluso por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos en su informe publicado en marzo de 2022. El guía Carlos, por ejemplo, llegó a custodiar a más de 600 presos, cuando los estándares internacionales han establecido que debería ser uno cada 15 personas privadas de la libertad, cuando se trata de un sistema que busca la rehabilitación de los internos. 

Los guías, de acuerdo con organizaciones como el Centro de Etnografía Interdisciplinaria Kaleidos y organismos como la CIDH, tampoco tienen incentivos o compensaciones en caso de traslados entre cárceles, y casi siempre son percibidos como castigos. Tampoco cuentan con seguros de vida. 

En el informe que elaboró la Asamblea Nacional luego de cuatro masacres carcelarias en 2021, evidenció que los agentes —que antes de la reforma penitenciaria que comenzó en 2011 se llamaban guías— no cuentan con un protocolo de gestión de talento humano, un plan de carrera específico, ascensos —hay agentes que llevan más de 20 años cerrando candados—, apoyo psicológico, ni procesos de reclutamiento idóneos. Aunque su labor diaria se divide en tres turnos: mañana, tarde y noche, casi siempre se quedan más horas. Sin embargo, no hay una compensación adicional por hacerlo, detalla el documento de la Asamblea.

En Ecuador, el porte de armas para los agentes no es legal y es aún un tema de debate. Sin embargo, organizaciones como la coalición de Alianza contra las Prisiones han cuestionado la posibilidad de otorgar armas por la falta de preparación que tienen los guías. Temen ejecuciones extrajudiciales. 

Pero para Carlos, es él y sus colegas quienes mejor conocen cómo funciona el sistema carcelario y han rechazado, más de una vez, que el SNAI siga liderado por generales en servicio activo, como el actual director del Servicio, Pablo Ramírez. “El SNAI pone de directores a policías y coroneles retirados que no saben del tema y no van a llegar a saber porque no conocen de seguridad penitenciaria. No es algo que se aprende en un cursito de seis meses, sino en el día a día, en los años de práctica”, dijo Carlos.