Cuando el Ministerio de Cultura y Patrimonio hizo público, el 19 de abril de 2023, que solicitó la derogación del decreto 1039, los cineastas celebraron. Este decreto, firmado por el presidente Lenín Moreno en 2020, fusionó al Instituto de Fomento de la Artes, Innovación y Creatividad (Ifaic) y el Instituto de Cine y Creación Audiovisual (ICCA), y creó el Instituto de Fomento a la Creatividad y la Innovación (IFCI). 

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Cuando ocurrió, gremios audiovisuales y cineastas reclamaron porque decían que esto debilitaba el sector. Incluso, en junio de 2021, presentaron una demanda ante la Corte Constitucional en contra del decreto. Ahora que el Ministerio pidió a Presidencia que deje sin efecto el decreto, la expectativa de algunos gremios de la Cultura ha vuelto. 

Sin embargo, el proceso parecería estar en una especie de pausa luego de que el presidente Guillermo Lasso decretara la muerte cruzada y todas las prioridades del gobierno se volcaran a ese tema. 

El pedido del Ministerio de Cultura está en manos de la Secretaría Jurídica de la Presidencia. GK consultó al Ministerio de Cultura si hay avances sobre el tema, pero hasta el cierre de la nota no recibimos respuesta. 

Como mucho de lo que está sucediendo en el Estado, lo único que realmente se estaría moviendo es el tema electoral. Además, es posible que el actual Ejecutivo cambie para noviembre de este 2023. Eso dejaría el pedido del Ministerio, de alguna manera, en el aire. 

La única realidad actual ante este pedido es que las autoridades de un gobierno reconocen que la decisión de un gobierno anterior, en un tema relacionado con lo cultural, no fue la más adecuada. 

Una fusión fracasada

Las distintas agrupaciones, corporaciones y colectivos cineastas del país han sido categóricas en denunciar que la aparición del IFCI —que significó la desaparición del ICCA— ha sido perjudicial para ellos. 

Por ejemplo, la entrega de fondos de fomento para el cine nacional habría ido disminuyendo con el paso del tiempo. 

De acuerdo a la Coordinadora del Cine y Audiovisual del Ecuador (CAE), con el IFCI el fomento al cine se redujo un 80%. Según la CAE, las cifras desde 2019 han sido estas:

  • En 2019 —todavía con el ICCA— se entregaron 1 millón 361 mil dólares para 52 proyectos, en 16 categorías de fomento —que incluyen las diferentes etapas de creación como escritura de guion, preproducción, distribución, etc.
  • En 2020 —entre el ICCA, que existió hasta mayo, y el IFCI— se entregaron 2 millones 167 mil dólares, aproximadamente, para 60 proyectos, distribuidos en 18 categorías.
  • Para 2021 —ya el IFCI en funciones como tal— la cifra descendió a 460 mil dólares que beneficiaron a 7 proyectos en tres categorías.
  • En 2022, el monto de fomento ha sido de 454 mil dólares, distribuidos en 9 proyectos, dentro de 5 categorías.

Otro problema que generó el decreto 1039 fue su posible inconstitucionalidad. El 24 de junio de 2021, un mes después de la posesión de Guillermo Lasso, la Corte Constitucional (CC) admitió a trámite la acción de inconstitucionalidad presentada por la CAE, encabezada por el realizador Manolo Sarmiento.

El gremio considera que el decreto presidencial de Moreno estaría reformando ilegalmente la Ley Orgánica de Cultura, vigente desde finales de 2016. Esta Ley, en su artículo 24, cuando se refiere al Sistema Nacional de Cultura, habla sobre los subsistemas que lo integran y entre los “subsistemas de artes e innovación” hace referencia a un Instituto de Fomento para las Artes, Innovación y Creatividad (el IFAIC) y a un Instituto de Cine y Creación Audiovisual (el ICCA). 

Por lo tanto, la Ley Orgánica de Cultura, al ser una ley orgánica no puede ser reformada por un decreto ejecutivo sino sólo por la Asamblea Nacional. 

Para el realizador Camilo Luzuriaga, el anuncio de abril de 2023 del Ministerio de Cultura y Patrimonio resulta importante porque “el Estado reconoce, en efecto, que fue una equivocación” la fusión del ICCA y de Ifaic.  

El director de filmes como La Tigra y Entre Marx y una mujer desnuda, considera que si bien la creación del Instituto de Fomento a la Creatividad y a la Innovación tenía el sentido de reducir el gasto estatal en un momento económicamente complicado por la pandemia, la idea propuesta debía funcionar “siempre y cuando no se sacrifique el objetivo. Y se supone que eso no iba a pasar”. 

Pero pasó.

Luzuriaga es contundente con su crítica. “Después de casi 3 años de existencia del IFCI, la realidad ha mostrado que no fue así. ¿Reducción de presupuesto? Cero. Resulta que, en volumen, la burocracia siguió siendo la misma. No es que despidieron a los burócratas o les dieron otras funciones. No, siguieron trabajando para el Ministerio. El IFCI siguió ocupando tres pisos; los dos que antes ocupaba el Ifaic y el que usaba el ICCA, por ejemplo”.

En lo referente a las funciones del IFCI —sobre todo en la entrega de fondos de fomento— Luzuriaga mantiene la perspectiva del CAE. “Las convocatorias se fueron reduciendo paulatinamente, al punto en el que, en algunas categorías, en concreto las de producción, el Instituto lleva sin hacer una sola desde 2022 hasta lo que va del 2023”.

La insistencia de los cineastas los llevó incluso a solicitar una reunión con el presidente Guillermo Lasso en Carondelet, que se realizó el 7 de febrero de 2023. De acuerdo a Luzuriaga, en ese encuentro —en el que estuvieron autoridades del Ministerio de Cultura y Patrimonio, como la ministra María Elena Machuca— Lasso escuchó los argumentos y “tomó la decisión de derogar ese decreto —el 1039— y restituir la institucionalidad, conforme a la Ley de Cultura”.

Camilo Luzuriaga

Camilo Luzuriaga durante una intervención en la Asamblea Nacional, mientras se discutía la Ley Orgánica de Transformación Digital y Audiovisual. Fotografía de la cuenta de Facebook de Mariana Andrade.

En esa misma reunión se le pidió al Presidente que se aumenten los fondos para las instituciones, que provienen del 5% de las utilidades del Banco del Desarrollo del Ecuador, principalmente. Es decir, no vienen del Presupuesto General del Estado. Los cineastas aseguraron que debía ser un incremento del 30%. Lasso la consideró una “propuesta atrevida”, pero se comprometió a revisar los números con el Ministerio de Finanzas.

¿Por qué el Ministerio de Cultura pidió la restitución?

Si bien para los cineastas la restitución del ICCA y del Ifaic es el resultado de la reunión con el Presidente, el Ministerio de Cultura y Patrimonio vendría analizando los problemas en el IFCI desde aproximadamente octubre de 2022. Especialmente ligados a la “merma en el fomento de la cadena de valor” de los procesos que deben llevar adelante.

De acuerdo a Joaquín Carrasco, subsecretario de Emprendimientos, Arte e Innovación, se consideró pedir la restitución para que desde esa doble institucionalidad —ICCA e Ifaic— se fomente tanto al cine como a las otras artes vistas desde la perspectiva de que son sectores estratégicos. Porque eso está “pasando a nivel internacional (….) y Ecuador no se quiere quedar afuera (…) de esta voluntad expresa respecto al desarrollo de las industrias culturales”, aclara el funcionario.

Carrasco dice que “por diferentes cuestiones, pese a que el IFCI tiene una dirección de cinematografía fuerte, habían encontrado una reducción en su capacidad de fomento”.

Para Carrasco, un hecho importante fue el diálogo con el sector y haber estado atentos a lo que los cineastas estaban impulsando. Como por ejemplo, la presión que ejercieron para que la Ley Orgánica para la Transformación Digital y Audiovisual fuera aprobada por la Asamblea, el 17 de diciembre de 2022. Para el funcionario, ante una norma como esa, que apuesta por una industria y por incentivos tributarios muy fuertes —para la inversión de estudios en producción audiovisual en Ecuador—, la institucionalidad desde el Ministerio de Cultura no se puede quedar atrás.

“Existe una intención clara, por parte del actual gobierno, de apostar al desarrollo de las economías de las empresas culturales como fuente de empleo, como fuente de riqueza. Pues es un momento de apostar, ¿no? Y eso implica varias gestiones. Entre ellas, solicitar la restitución”, dice Carrasco.

Este es el punto más decisivo porque “con el decreto 1039 hubo modificaciones al reglamento de la Ley, pero no a la Ley Orgánica de Cultura (…) La Ley vigente sigue recogiendo una institucionalidad con dos institutos”, explica Carrasco.

Para el Subsecretario, esto es parte de una revisión mucho más crítica que se está realizando al interior del IFCI y la idea del fomento, porque “lo que no puede pasar es que se llegue a un momento en que se genere una especie de dependencia del fondo concursable, que se dé una pelea por el fondo concursable, porque no hay cama para tanta gente”. 

Carrasco dice que el objetivo fundamental es que el fomento se enfoque en el desarrollo de industria. Y para esto “necesariamente tengo que articular con la demanda, porque industria sin oferta y demanda conectada no es industria”.

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Eduardo Varas
Periodista y escritor. Autor de dos libros de cuentos y de dos novelas. Uno de los 25 secretos mejor guardados de América Latina según la FIL de Guadalajara. En 2021 ganó el premio de novela corta Miguel Donoso Pareja, que entrega la FIL de Guayaquil.
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