Las polémicas declaraciones de Aquiles Álvarez

El 14 de mayo de 2023, Aquiles Álvarez se sentó en el sillón de Olmedo, para desde ahí ejercer como alcalde de Guayaquil. Sin embargo, en su corto tiempo como alcalde ha estado marcado por polémicas declaraciones a la ciudadanía, colectivos y figuras públicas. 

Su predecesora, Cynthia Viteri, también se caracterizó por una administración con comentarios y acciones polémicas. La más recordada es, quizás, cuando bloqueó con camionetas municipales la pista de aterrizaje del aeropuerto de Guayaquil para impedir que aterrice un vuelo en plena pandemia del covid-19. El avión iba a recoger a pasajeros de nacionalidad española que se habían quedado atrapados en Ecuador cuando la OMS declaró la emergencia sanitaria.  

Otro hecho fue cuando la entonces alcaldesa llegó a Quito con tres docenas de camionetas, un centenar de policías municipales y agentes de tránsito para participar en el primer Encuentro Nacional por la Seguridad, que convocó el presidente Guillermo Lasso el 7 de junio de 2022.

Con el cambio de liderazgo, muchos pensaron que cambiaría también que terminaría la polémica. Pero el primer mes de alcalde, Álvarez ha demostrado que no será así. 

“Yo no puedo resolverle su vida, conforme a sus exigencias”

El 26 de junio la cuenta de Twitter Vía a la Costa Progresa publicó un video en el que se ve a dos agentes de la Autoridad de Tránsito Municipal (ATM) dirigiendo el tráfico en la entrada de un colegio privado, en una vía paralela a esa vía. 

El agente está resguardado por conos de seguridad que obligan reducir la velocidad de los automóviles que entran y salen de la institución. El vídeo capta cómo al mismo tiempo, en la vía a la Costa, una mamá con su hijo y otros ciudadanos intentan cruzar la autopista —que es de alta velocidad— sin ningún tipo de ayuda de agentes de tránsito.

El video estaba acompañado de un texto: “Alcalde Aquiles Álvarez, los agentes de tránsito de la AMT están más preocupados por el ingreso de vehículos a un colegio privado que por la vida de una madre que intenta cruzar con su hijo la Vía a la Costa para ir a la escuela fiscal que está en la cooperativa 24 de mayo”.

A este mensaje el alcalde de Guayaquil respondió de forma inesperada y poco usual: “Buen día. ¿Usted trabaja? Escribe todo el día… Yo no puedo resolverle su vida, conforme a sus exigencias. Guayaquil no solo es via a la costa. Esto es trabajo en conjunto con la sociedad entera. Referente a esto, también es culpa de la madre que cruza exponiendo a sus hijos de esa manera. También la gente tiene que hacer conciencia y dar la vuelta y no exponer a sus hijos, peor después de lo que pasó la semana pasada”.

Con el último comentario, el alcalde hizo referencia a los niños que estaban con su abuelo esperando en la vereda para  alquilar unas bicicletas con su abuelo en esta vía y fueron atropellados por un vehículo que venía a toda velocidad y que más tarde se descubrió que el conductor estaba en estado de ebriedad, el 19 de junio de 2023.

En redes sociales no faltaron los comentarios a favor y en contra. Pero muchos vecinos dijeron que la inseguridad en la vía es un problema del sector, sobre todo a las personas que van a pie. 

Dijeron que en varias ocasiones han interrumpido la circulación para exigir a la alcaldía pasos peatonales y semáforos. Y que gracias a esa presión se logró poner un paso elevado a la altura de Mi Comisariato.

Oto Coello publicó una foto que muestra que desde el lugar que cruzó la mujer hasta el puente más cercano hay 1.6 kilómetros. Es decir, 17 minutos caminando.

El urbanista John Dunn dice que la Vía a la Costa es una carretera que tiene un alto flujo vehicular y que en teoría no debería haber colegios en las áreas inmediatas a esta vía.

Sin embargo, el arquitecto recalca que la ciudad ha crecido exponencialmente hacia la Vía a la Costa y esto genera que el tráfico de la zona dependa de un solo cordón y no se está distribuyendo de forma equitativa. 

Este no es un escenario ideal, “la ciudad debe pensar hacer dos vías, del valor a la Vía  a la Costa, para liberar un poco la carga vehicular”.

Dunn explica que con el paso del tiempo, lo más probable es que la Vía a la Costa  se volverá una vía interna y que se verá obligada a disminuir la velocidad con la que circulan los autos y se terminará poniendo pasos peatonales y semáforos. 

“Debo administrar para todos los guayaquileños, no solo para algunas agrupaciones en especial”

Como todos los años, la población LGBTIQ+ esperaba realizar su tradicional desfile del Orgullo en la calle 9 de Octubre, en el centro de Guayaquil. Sin embargo, el 21 de junio de 2023, la Alcaldía de Guayaquil negó el permiso.

Tras la respuesta, los colectivos LGBTIQ+ dijeron que les preocupa la negativa del Municipio y que esta acción no solo sería discriminatoria sino “homo-les-trans odiante”. 

Los colectivos recordaron que, desde 2014, el desfile siempre ha tenido el mismo trayecto —avenidas Olmedo, Guayaquil y 9 de Octubre y terminando en el parque Centenario.

Ese año el ex alcalde Jaime Nebot anunció públicamente que permitiría esta marcha. Desde esa fecha a la actualidad la marcha siempre había tenido el apoyo de la Alcaldía del Puerto Principal. 

Además, el colectivo dijo que ni en las “administraciones más adversas, como la de Jaime Nebot o Cynthia Viteri, conocidas por los guayaquileños como conservadoras, la población LGBTIQ+, sus familiares, amigos y aliados jamás han sido desplazados, menoscabados y despreciados”. 

La alcaldía de Álvarez había propuesto a los colectivos LGBTI hacer el tradicional desfile en una avenida del Parque Samanes, al norte del puerto principal. Los activistas y organizaciones respondieron que rechazaban el ofrecimiento ya que esa zona “es peligrosa” y está sin luces. 

Además recalcaron que harían la marcha sobre la avenida 9 de Octubre, con o sin permiso de la Alcaldía.

Pamela Troya, activista LGBTI, dijo en una entrevista con la cuenta de Instagram Visionarias, que relegar la marcha a un sector de Guayaquil que es foco de la delincuencia y falta de iluminación tiene una connotación simbólica bastante fuerte. “Nos están diciendo ‘no tienen merecimiento de ningún otro lugar’”.

Tras las quejas ciudadanas, Álvarez difundió un video en el que avalaba la decisión del Municipio de Guayaquil y dijo que “era una nueva administración, con un estilo distinto, un estilo para administrar Guayaquil con una visión de respetar y priorizar el bien común”. 

Además, aseguró que es su deber  “administrar para todos los guayaquileños, no solo para algunas agrupaciones en especial, no para algunas religiones o partidos políticos”.

Sin embargo, Troya cuestiona que cuando el actual alcalde ganó la alcaldía cerró varias de las vías de la ciudad para celebrar su victoria.

En medio de la discusión, dos colectivos interpusieron acciones de protección para que la marcha se pueda realizar en el centro de Guayaquil. Ganaron la acción.

En el fallo de la jueza se dejó sin efecto el oficio municipal en el que no permitía que se realice la marcha en el centro de la ciudad. La jueza especificó que la marcha se realizará en el centro de la ciudad, en las calles que los colectivos habían solicitado.

En el fallo también se aclara que la marcha debe contar “con el resguardo de la fuerza pública para que los colectivos del Orgullo Guayaquil desarrollen el evento”.

Tras la decisión, Álvarez tuvo que negociar con los colectivos LGBTIQ+ sobre las condiciones en las que se realizaría la marcha: 

• Que se prohíba la presencia de menores de edad sin autorización de sus padres. 
• No desmanes, ni desnudos, ni ofensas hacia ningún tipo de grupo social

Pese a la resolución, Álvarez logró reducir el tiempo de la marcha del próximo 1 de julio, que comenzará a las  cuatro de la tarde y terminará a las seis y media de la tarde. 

Originalmente, la solicitud decía que el evento comenzaría a las dos de la tarde y terminaría cerca de la medianoche.

 “La gente no es tonta, sabe quién trabaja y quien no, quien trabajó y quien pasó de farra 4 años

 El 6 de junio, apenas 24 días de asumir el rol, comenzó una pelea entre Cynthia Viteri, ex alcaldesa de Guayaquil, y Aquiles Álvarez. En el intercambio, Álvarez le recriminaba la falta de obras en la ciudad.

El 4 de junio de 2023, un ciudadano se quejó por twitter de la falta de trabajo en el Puente de la Ladrillera—en el noreste de Guayaquil. 

Álvarez le respondió y  le dijo que“todo ha estado paralizado”. “Supuestamente nos dejaron las cintas rojas para inaugurar obras, pero todo ha estado parado y es un desastre. Guayaquil está patas arriba. La reactivación va en camino. Poco a poco. Abrazo”, dijo el alcalde.

Dos días después, Viteri contestó el mensaje.  

Desmintió la respuesta del alcalde, alegando que si la situación fuera tan mala, Álvarez no habría ratificado al director de Obras Públicas, de su administración. Además, Viteri aseguró que todas las obras que en este momento promociona la Alcaldía de Guayaquil fueron ejecutadas en su mandato, y que además de esas hay otras 74 que están en plena ejecución.

“Bienvenido al repugnante sistema político al que me enfrenté manejado desde el Gobierno: sin recursos, sin combustible, con pésimo asfalto y esto a sabiendas de que perjudicaba a los guayaquileños. Al final, esta pequeñez de alma les cobró factura”, dijo la ex alcaldesa

Álvarez volvió a responderle. “La política es repugnante, si, pero más para los que pasan por lo público sin hacer nada y victimizandose, siendo figuretis, que en vez de trabajar, pasaron viajando como usted”. Además, agregó que “la gente no es tonta, sabe quién trabaja y quien no, quien trabajó y quien pasó de farra 4 años de administración. Por eso la gente no se olvida ni de Correa, ni de Febres Cordero, ni de Nebot”, dijo el alcalde.

Tras las fuertes declaraciones, Viteri no dudó en responder. “Dedíquese menos al figuretismo del Twitter y atienda a los guayaquileños porque ya viene El Niño. Se nota que está rodeado de un grupo de resentidos del PSC. Me cuentan que en Bélgica están asustados de que sea el nuevo Lenín”.

La pelea no paró por varias horas y las que ambos, se enviaron tuits donde se acusaban por la falta de obras en la ciudad, a tal punto que cada punto del que acusaban al otro estaban enumerados.