El retorno de los cientos de ecuatorianos que estaban en Ucrania tuvo un cambio de planes que generó malestar entre varios padres de familia que esperaban que sus hijos arribasen mañana, 4 de marzo, al Ecuador. “Queremos informar que el vuelo que despegó de Varsovia con escala en Madrid”, dijo el canciller Juan Carlos Holguín en un video compartido a periodistas, “salió con 248 pasajeros”. Inicialmente se esperaba que lleguen 350.
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Holguín calificó la decisión como “dura” y dijo que se debía a un “cambio operacional”. El canciller ecuatoriano dijo que el gobierno había decidido evacuar primero a los ecuatorianos que estaban en Eslovaquia y Hungría. El avión que trae a los ecuatorianos tiene capacidad para 388 pasajeros.
Intentar sacar de la zona de guerra a cientos de ecuatorianos ha sido una tarea con sobresaltos. Se estima que la colonia ecuatoriana en Ucrania era de unas mil personas —la más grande de todos los países latinoamericanos. Evacuarlos se volvió una prioridad cuando Rusia concretó sus amenazas de invadir Ucrania, obligando a cientos a salir en trenes, buses e incluso a pie. Muchas de estas personas consideran que la asistencia del gobierno ecuatoriano no fue oportuna.
De su parte, la Cancillería ha insistido en que era difícil gestionar logísticamente una evacuación de tal proporción en una zona de guerra. En un momento, guardias fronterizos ucranianos impidieron que cualquier hombre, de la nacionalidad que fuese, saliera de su país.
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Lo que sucedió con el primer vuelo humanitario que llega mañana, le dijo una persona con conocimiento del caso a GK pero que prefirió no ser citada, fue que el gobierno decidió evacuar a todos los ecuatorianos que estaban en Eslovaquia, y no a las cerca de 50 personas que estaba programado que salgan de ese país. Al final se evacuaron a unos noventa ecuatorianos, lo que habría causado errores y confusiones en la lista definitiva del vuelo.
Esto habría causado que varios de los estudiantes que esperaban en el aeropuerto de Varsovia, cuya cifra exacta no ha sido revelada, se quedaran sin cupo en el vuelo. El canciller Holguín dijo en un video que mañana saldrá otro vuelo humanitario, que traerá a 350 pasajeros. De esta forma, espera el gobierno, el sábado estarían ya en Ecuador 500 repatriados.
No abandonar mascotas, otro obstáculo para el retorno
Además de las razones operacionales aducidas por el canciller Holguín, muchos jóvenes no habrían querido embarcarse en el vuelo humanitario para no tener que dejar a sus mascotas. Ayer, 2 de marzo, se supo que por regulaciones aéreas internacionales solo podían ir 8 mascotas en el vuelo. Había cerca de 70 animales domésticos entre los repatriados.
Una de las jóvenes que no pudo tomar el vuelo es la hija de Abelson Villarreal. Ella vivió en Ucrania por 3 años. Villarreal asegura que su hija no pudo tomar el avión porque llevaba con ella a su gata. “El Canciller al inicio dijo que los jóvenes viajarían con sus animalitos y hoy les dijeron que no podían hacerlo”, dijo Villarreal.
Otra persona, que no quiso que su identidad se revele, dijo que su hijo estudiaba en Ucrania hace tres años y hoy tenía que embarcar el vuelo humanitario.
No pudo hacerlo porque llevaba a su perro pomerania de 2 kilos. “Ofreció algo que no podía cumplir”, dijo la mujer sobre la oferta del gobierno ecuatoriano de incluir a las mascotas en el vuelo. “No pueden dejarlas porque son como sus hijos, ellos son migrantes, vivían solos en un país extraño a ellos, las mascotas eran su familia, las mascotas les ha acompañado en su soledad”, dijo la mujer, que ha gestionado un pasaje comercial para su hijo y perro.
En un video que recibió GK grabado en Varsovia se escucha a estudiantes reclaman al funcionario de la Cancillería porque no embarcaron al vuelo niños y un hombre que tenía una discapacidad en la pierna.