A las ocho de la mañana de hoy, 21 de julio, la excontralora Valentina Zárate compareció ante la Comisión de Fiscalización de la Asamblea como parte del trámite del juicio político en contra del excontralor Pablo Celi.

Al iniciar su comparecencia, Zárate explicó su trayectoria en la Contraloría. La exfuncionaria dijo que trabajó en la institución durante 17 años, tema que fue uno de los dos puntos por los que la Asamblea la llamó a comparecer.

Zárate dijo en el 2004 entró como pasante y que su último cargo fue el de subcontralora en 2021, cuando reemplazó por 60 días a Pablo Celi (que cumple prisión preventiva desde abril pasado por el presunto desvanecimiento de glosas en el caso Las Torres). Zárate dijo que solicitó a la Contraloría un certificado de todos los cargos que ocupó, sin embargo, esta institución no se lo entregó. 

En su intervención dijo que en su breve tiempo frente a la Contraloría detectó un “enjambre” de malas prácticas, relacionadas con la aprobación de exámenes especiales fuera del tiempo legal.

Zárate denunció el uso de 1.000 informes caducados.  “Me encontré, al estar en funciones, con que muchos de los informes que son emitidos por Contraloría se aprueban fuera de plazo”, dijo la exsubcontralora. Además, dijo que  hizo un informe jurídico al que llamó “informes caducados“. Informe que fue revocado después de su renuncia. 

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Tras su declaración cuestionó al nuevo contralor subrogante, Carlos Riofrío. “¿Qué va a hacer Riofrío con casi 1000 informes aprobados fuera de tiempo?”, dijo. Zárate le preguntó retóricamente a los asambleístas si Riofrio iba a actuar con base a estos documentos caducados.

Zárate dijo que hasta junio pasado se habían podido hacer 4.294 reposiciones de documentos de los 22.000 que se habían perdido tras la quema del edificio de la Contraloría en las protestas de octubre de 2019. “En estos días me sorprendió que el ingeniero Riofrío afirme que se ha repuesto toda esta información y se han reconstruido los informes”, dijo Zárate.

La exsubcontralora aprovechó la oportunidad para denunciar que ha recibido llamadas extrañas. Una de esas, dijo, fue a través de WhatsApp: una voz le dijo que le iban a enviar informes de inteligencia. La segunda fue una llamada en la que se hicieron pasar por el secretario jurídico de la Presidencia, Fabián Pozo. También le solicitaron que remueva a los siguientes funcionarios: subcontralor de Auditoría, director provincial de Pichincha, varios directores de Auditoría, y ciertas áreas administrativas. La voz le mencionó que le iban a mandar los nombres de los reemplazos en una llamada posterior, pero no sucedió. La tercera llamada la realizaron con un tono “más hostil”, dijo Zárate, increpando por qué no hizo los cambios. Según ella, le dijeron que “Guillermo, refiriéndose al presidente, estaba muy preocupado”. 

El segundo punto por el que fue llamada a comparecer fue por unas declaraciones que dio a diario El Comercio sobre la quema del edificio de la Contraloría. En abril de 2021, Zárate le dijo al perioódico que “la Contraloría se quemó desde adentro”. La exfuncionario dijo que sus palabras fueron tergiversadas y que se refería a que “personas entraron al edificio y lo quemaron estando dentro”, pero que no insinuó que algún funcionario lo haya hecho. 

Zárate es una de las 67 personas llamadas a rendir su testimonio dentro del trámite de juicio político al hoy ya ex contralor subrogante, Pablo Celi.  También han comparecido Diana Atamaint, presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Fausto Camacho, asambleísta, y José Cabrera, vocal del CNE.Según el cronograma de la comisión de Fiscalización, se rendirán comparecencias hasta el 26 de julio. Próximamente comparecerán Diana Salazar, fiscal General del Estado, Andrés Michelena, ex ministro de Telecomunicaciones, Pablo Celi, entre otros.