En su nuevo libro, Las tres versiones, Eduardo Varas Carvajal, toma los aspectos que caracterizaron la historia de El Niño del Terror como génesis de su más reciente obra de ficción. Sí: no es un texto periodístico. Eso ya lo hace en su día a día en GK.
Las tres versiones tiene un personaje central que está inspirado en Juan Fernando Hermosa, el niño del terror. Hermosa fue un adolescente asesino en serie ecuatoriano, cuyas víctimas eran, principalmente, taxistas. Pero la obra de Eduardo Varas no es una biografía, ni un recuento de su atribulada existencia. “Es una versión que está basada en él, no es la historia de él”, me explica Eduardo Varas.
La novela, el quinto libro del escritor, músico y periodista guayaquileño, es publicada por la editorial Cadáver Exquisito. La nueva novela de Varas, editor adjunto de este medio, se presentará en Quito el jueves 27 de octubre de 2022 en la librería Bookish, a las 7 de la noche.
En Guayaquil, la presentación fue en la Feria Internacional del Libro Guayaquil 2022, el 24 de septiembre de 2022.
En Las tres versiones, Varas utiliza partes de la realidad para adentrarse en la ficción. Toma, por ejemplo, elementos del asesinato de la madre de Hermosa, una mujer con discapacidad auditiva, que fue acribillada por la Policía el día que capturaron a Hermosa. También utiliza detalles de la muerte del propio Hermosa.
Eduardo Varas dice que nunca pensó en hacer un texto periodístico. Los protagonistas ya están muertos y el trato periodístico que se le dio al caso en su momento, en la década de 1990, no fue el mejor, lo que no dejó suficiente información certera. “Pero aparte, como me dedico al periodismo, tener que escribir fuera de mi horario laboral cosas periodísticas, se me hacía muy tedioso”, dice Varas. “La historia era mucho más densa, pero yo no quería contar mucho de eso”, explica en una pausa de su ajetreada jornada en GK.
Portada del libro Las Tres Versiones.
El proceso de escritura
A Eduardo Varas, uno de los 25 secretos mejor guardados de América Latina según la FIL de Guadalajara en 2011, le cuesta sentarse a escribir todos los días, ya sea por disciplina o cansancio. Pero cuando se plantea un proyecto, está todo día pensando en él. Así que, cuando termina su jornada habitual, se sienta y escribe todo lo que se le ha ocurrido horas antes.
“Escribir es una forma de controlar el tiempo”, dice. “En teoría, todo pasa muy rápido, pero cuando uno escribe necesita dedicación porque escribir una página toma mucho tiempo”, reflexiona. Por eso, para él, escribir es desconectarse de las obligaciones y una forma de entender lo que pasa a su alrededor.
Las tres versiones todavía no está a la venta. Después de su presentación en la FIL Guayaquil empezará a distribuirse en librerías, principalmente independientes.
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