Juicio a Abdalá y Jacobo Bucaram no es nulo, resolvió Sala Penal de la Corte de Pichincha

Se revocó la nulidad en el caso por presunta delincuencia organizada en el que están involucrados Abdalá Bucaram Ortiz, expresidente del Ecuador, y su hijo Jacobo Bucaram Pulley. Hoy, 26 de julio de 2021, se instaló la audiencia de la apelación presentada por la Fiscalía en este caso, en el que además están involucrados dos agentes de tránsito y dos ciudadanos más. Con esta decisión, el proceso judicial contra padre e hijo continuará. 

La audiencia finalizó cerca de las cinco de la tarde. La Sala Penal de la Corte Provincial de Pichincha aceptó la apelación en el proceso que investiga a ambos hombres por presunta delincuencia organizada en la negociación de pruebas para detectar covid-19.  

¿Por qué hubo una audiencia de apelación? 

El 21 de junio de 2021, la jueza Verónica Medina declaró la nulidad de todo el proceso por presunta delincuencia organizada en la comercialización de pruebas rápidas para la detección de covid-19 durante la emergencia sanitaria. Dos de los procesados en este caso son Abdalá Bucaram Ortiz, ex presidente del Ecuador, y su hijo Jacobo Bucaram Pulley. La declaratoria de nulidad implicaba que el proceso debía regresar a la etapa de investigación previa, dejando sin efecto todo lo que se había actuado desde que empezó la instrucción en fiscal, en julio de 2020.

Ese día la Fiscalía anunció que apelaría la decisión. 

La jueza tomó esta decisión en la reinstalación de la audiencia en la que se debía conocer si los procesados iban a juicio o no. Medina acogió el argumento de la defensa de Jacobo Bucaram que alegó que su cliente no había sido “notificado con la orden de detención con 72 horas antes de su captura”, y tampoco se le había notificado de la investigación previa, lo que implica una supuesta violación al debido proceso. 

El 19 de julio, la Fiscalía denunció que Eduardo Díaz, fiscal encargado de delincuencia organizada, había recibido amenazas telefónicas y por notas de voz después de apelar el sobreseimiento a favor de Bucaram.. La Fiscalía no confirmó si las amenazas mencionan el nombre de Bucaram Ortiz. 

Hoy, la Sala Penal dispuso que la jueza Verónica Medina sea sancionada y que el caso vuelva al sorteo para la audiencia preparatoria de juicio. 

En junio de 2020, en un operativo dentro de las investigaciones que la Fiscalía hacía por presunto peculado en la compra de insumos médicos en hospitales públicos, se allanó la casa de Bucaram Ortiz, un complejo amurallado en el norte de Guayaquil. La Fiscalía encontró cinco mil mascarillas y 2 mil pruebas rápidas de covid-19 en el lugar. Tras la diligencia, la Fiscalía presentó cargos contra Bucaram Ortiz y su hijo.  

En noviembre de 2020, la fiscalía vinculó a tres agentes de la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT) de Quito, que actuaban como seguridad de la red delictiva, a Sheiman Ore, ciudadano israelí que sobrevivió a un ataque en la Penitenciaría del Litoral (en los extramuros industriales de Guayaquil), en el que fue asesinado su compatriota Shy Dahan, también involucrado en el caso. Además de otra persona que había denunciado a los israelíes con quienes había hecho negocios sobre la venta de las mascarillas y las pruebas. 

No es el único proceso que ha enfrentado el polémico ex presidente ecuatoriano. El 16 de julio, Bucaram Ortiz fue sobreseído en el caso por presunto tráfico de bienes de patrimonio cultural por haber encontrado en su casa “varias piezas arqueológicas que no fueron justificadas” en el mismo operativo. El sobreseimiento implica que el fiscal se abstenga de acusar, cuando concluya que los hechos no constituyen un delito, por falta de pruebas u otros motivos.

En otro caso,  en julio de 2020, Bucaram fue llamado a juicio por el presunto delito de tráfico de armas.