La nueva Asamblea Nacional se posicionó esta mañana y horas antes de que los legisladores ocupasen sus curules empezó el primer desencuentro después de que el asambleísta electo por Guayas, César Rohon, anunció que abandonaba al bloque del Partido Social Cristiano en medio de una disputa por las alianzas para  conseguir la presidencia de la Asamblea Nacional. 

Según Rohon, la principal causa de su separación se debe a  la posible creación de una “Comisión de la Verdad” que revisaría e investigaría sentencias  judiciales condenatorias por corrupción, en  especial, de los últimos cuatro años.

En una entrevista con Teleamazonas esta mañana, Rohon dijo que a los legisladores no les corresponde revisar fallos judiciales porque el sistema judicial es independiente: “la Asamblea no tiene nada que hacer con la justicia”.  Además, el asambleísta explicó que “todo lo que se habla de indultos, amnistías, están prohibidos por la ley, por lo que la Asamblea no debe ocuparse de esos asuntos, sino que le corresponde a las cortes y tribunales revisar las alegaciones judiciales en cada caso y resaltó que  “tiene que respetarse el ámbito de los poderes, uno es el ámbito judicial y otro es el ámbito legislativo”.   

Sin embargo,  esta propuesta nace del plan de gobierno del excandidato presidencial de UNES, Andrés Arauz, pero que se ha retomado durante las negociaciones entre el Partido Social Cristiano  y CREO para sellar el acuerdo político en la elección de las autoridades de la Asamblea Nacional.  

En el mes de abril, Pierina Correa dijo a Teleamazonas  que el  objetivo de una Comisión de la Verdad es que se analicen las sentencias judiciales por hechos de corrupción entre los que estarían el caso Odebrecht, por el que está sentenciado el expresidente Rafael Correa a ocho años de prisión  por el delito de cohecho. El exvicepresidente Jorge Glas fue sentenciado a seis años de prisión por el delito de asociación ilícita. “En el caso de Jorge Glas, tiene cumplido el 40% de la pena y en términos normales no le permiten acceder a la libertad. No se está pidiendo nada fuera de foco”, dijo  Pierina Correa a Teleamazonas.

Noticias Más Recientes

Según la asambleísta, hermana del expresidente ecuatoriano, la comisión estaría compuesta por “personas objetivas y ajenas” a los partidos ecuatorianos. Correa dijo que estaría integrada por  personajes de la comunidad internacional  ya que es “bastante difícil mantener la objetividad” y  “nos allanaríamos al informe de esta comisión”, dijo en una entrevista con Primicias. Según Corea la creación de esta comisión busca que se “pare con la judicialización de la política” que según los partidarios del correísmo, ahora aglutinados en la coalición Unión por la Esperanza (UNES), hubo en el gobierno de Lenín Moreno.

Según Mauricio Alarcón, abogado y director de Fundación Ciudadanía y Desarrollo, crear una Comisión de la Verdad en estos momentos “no es posible legislativamente”. Lo que la Asamblea puede hacer, explica Alarcón, es crear una comisión especial para investigar un hecho específico, como se hizo con el paro de 2019. “El informe que produzca esa comisión puede dar recomendaciones o exhortar una acción por parte de otras entidades estatales, pero  que no tendría repercusiones legales ni cambios en el sistema judicial”, dijo Alarcón. 

En mayo de 2007, durante el gobierno de Rafael Correa, se creó una Comisión de la Verdad para esclarecer los hechos de violencia política ocurridos en el país entre los años 1984 y 2007. El órgano expidió un informe que pasó a manos de la Fiscalía, que era la encargada de judicializar los hechos contenidos en el informe. 

La propuesta causó reacciones diversas. El exvicepresidente Otto Sonnenholzner dijo en su cuenta de Twitter que una Comisión de la Verdad “no puede reemplazar al sistema judicial. Los acuerdos no pueden hacerse en torno a intereses personales,sino alrededor de grandes temas nacionales fundamentales».  Hoy los 137 asambleístas recién posesionados deben votar para escoger al Presidente de la Asamblea y a dos Vicepresidentes. Hasta las 2 de la tarde, no había aún un consenso para una elección.