El caso Pantalla, explicado

El caso Pantalla empezó en abril de 2024. Investiga a una ex jueza y a cinco ex funcionarios del Consejo de la Judicatura  que habrían cometido actos de corrupción para favorecer a postulantes e influir en los resultados del concurso para la selección de los jueces de la Corte Nacional de Justicia (CNJ) en 2023. Entre los seis implicados en esta red, acusada por el presunto delito de asociación ilícita, está Wilman Terán, ex presidente de la Judicatura.

El 12 de junio de 2025, Terán, quien fue sentenciado previamente en los casos Metástasis, por delincuencia organizada, e Independencia Judicial, por obstrucción a la justicia, fue llamado a juicio por el juez de la CNJ, Fernando Cantos. 

Es el tercer proceso que enfrentará desde diciembre de 2023, cuando fue detenido.

En el caso Pantalla también fue llamada a juicio Anabel Torres, jueza de Santo Domingo de los Tsáchilas, quien era pareja de Terán, está prófuga y tiene notificación roja de la Interpol. Ella había postulado para ser jueza de la CNJ y supuestamente buscaba beneficios para ganar el concurso.

Te explicamos el caso. 

La Fiscalía hizo allanamientos en abril de 2024 sobre el caso Pantalla. Fotografía tomada de la cuenta X de la Fiscalía.

Los primeros indicios

El concurso para renovar parcialmente a 7 de los 21 jueces de la Corte Nacional de Justicia empezó en agosto de 2023. El Consejo de la Judicatura abrió la convocatoria que sería entre el 6 y el 19 de ese mes.

Wilman Terán llevaba apenas seis meses presidiendo el Consejo de la Judicatura, el máximo órgano de vigilancia de la Función Judicial del Ecuador, tras ser designado por el cuestionado Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS) de una terna que había sido propuesta por la misma Corte Nacional. 

En esa fecha, Terán dijo que el proceso se desarrollaría con “total transparencia”. Señaló que a más de una veeduría ciudadana —personas designadas por el CPCCS para vigilar el proceso— se conformaría una comisión cívica que diera seguimiento a cada una de las fases del concurso.

Se inscribieron decenas de aspirantes, entre ellos, Anabel Torres, la entonces pareja de Terán. Durante las primeras fases del concurso —postulación y examen de mérito y oposición— todo se dio sin ningún contratiempo.

Sin embargo, a finales de 2023, surgieron alertas sobre posibles irregularidades. 

En febrero de 2024, el entonces director nacional de Asesoría Jurídica de la Judicatura, José Luis Peñaherrera, denunció en la Fiscalía la supuesta injerencia de funcionarios en el concurso de jueces de la CNJ.  

Dijo que la Dirección Nacional de Tecnologías de la Información recibió la supuesta disposición de la Presidencia de la Judicatura para “entregar bases de datos encriptadas que contenían los bancos de preguntas y respuestas del concurso”. Estos respaldos fueron entregados a los asesores de Terán. 

Según la Fiscalía, Terán fue señalado de tener intereses personales en el concurso para supuestamente beneficiar a su pareja y para conformar una mayoría afín al correísmo en la Corte Nacional —para ese momento, Terán ya guardaba una estrecha relación con el movimiento político, a pesar de que estas funciones públicas deberían ser apartidistas. 

Pero ese no era el único caso que salpicaba a Terán. Dos meses antes de que se abriera la investigación del caso Pantalla, el 14 de diciembre de 2023, Terán fue detenido por el caso Metástasis, una red de delincuencia organizada que cooptaba a jueces y funcionarios. 

Terán presentó un habeas corpus para defenderse en libertad, pero la CNJ lo negó. El 20 de diciembre, presentó su renuncia a la Judicatura. Un mes después, en enero de 2024, la Judicatura declaró la nulidad del concurso de jueces debido a trabas legales y supuestos actos de corrupción en el concurso, y empezó uno nuevo —que en junio de 2025 continúa.

De tráfico de influencias a asociación ilícita

Tras la denuncia del director nacional de Asesoría Jurídica de la Judicatura, José Luis Peñaherrera, en febrero de 2024, la Fiscalía abrió una investigación por tráfico de influencias dentro del concurso de jueces al que denominó caso Pantalla.

La madrugada del 24 de abril de 2024, como parte del caso Pantalla, la Unidad Selecta de Transparencia de la Fiscalía —encargada de investigar delitos relacionados con corrupción— hizo ocho allanamientos en Tumbaco, Ciudadela Ibarra, Quitumbe, Conocoto, Rumiñahui y Calderón, todos en Quito. 

Durante el operativo se decomisaron celulares, computadoras y documentos que, según la Fiscalía, tenían relación con el delito que se investigaba en ese entonces.

Seis meses después, el 5 de septiembre de 2024, la Fiscalía hizo otros allanamientos. 

Esta vez en los departamentos de Tecnologías de la Información y de Talento Humano del Consejo de la Judicatura, donde había documentos sobre cómo se hacía el concurso. La Fiscalía había pedido ocho veces que la Judicatura enviara esos documentos, pero no fueron entregados. 

Ese día detuvieron a Milton Herrera, asesor de la Presidencia de la Judicatura, y Santiago Cifuentes, asesor jurídico de Terán y coordinador de Relaciones Internacionales de la Judicatura. 

Un juez anticorrupción ordenó la prisión preventiva para ambos por el presunto delito de tráfico de influencias. “La investigación detalla que los dos, valiéndose de sus cargos de asesores, presuntamente ejercieron influencia en funcionarios jerárquicamente inferiores”, señala el informe de la audiencia de formulación de cargos. 

El objetivo de ambos, dice la Fiscalía, era conseguir información “privilegiada” del concurso para beneficiar a 20 participantes, cuyas identidades no fueron reveladas. Por ejemplo, habrían obtenido el banco de preguntas de las pruebas teóricas del concurso. 

Hasta entonces eran solo dos implicados: Milton Herrera y Santiago Cifuentes. 

Pero el 26 de octubre de 2024, la Fiscalía vinculó a otras cuatro personas: 

• Wilman Terán, ex presidente de la Judicatura 
• David Guzmán, ex director general 
• Juan Carlos Egas, ex director de Talento Humano y encargado del concurso de jueces
• Anabel Torres, ex pareja de Terán, jueza de Santo Domingo y postulante. 

La entonces fiscal general, Diana Salazar, dijo en la audiencia de vinculación que hubo memorandos, oficios e informes de la Judicatura que demostrarían su injerencia en el concurso. 

Detalló cómo lo hicieron: 

En la fase de postulación del concurso de jueces, los implicados habrían permitido que cuatro postulantes continuaran en el proceso a pesar de que se inscribieron fuera del horario permitido. 

En la fase de méritos, Juan Carlos Egas habría permitido que dos concursantes modificaran documentos relacionados con el concurso. 

En la fase evaluación y puntaje, los procesados habrían aumentado los puntajes de diez postulantes en la prueba teórica. 

Además, según la Fiscalía, Santiago Cifuentes, asesor jurídico de Terán, habría hecho el examen escrito que le correspondía hacer a Anabel Torres para asegurar su calificación en el concurso. 

En la audiencia de vinculación, el juez ordenó prisión preventiva contra Terán, quien ya estaba detenido en la cárcel de la Roca, y contra Torres, que se encuentra prófuga. Para Guzmán y Egas ordenó medidas cautelares: la prohibición de salida del país, la retención de sus cuentas y la prohibición de enajenar bienes. 

Cuatro días después, el 30 de octubre de 2024, el entonces fiscal subrogante Wilson Toainga reformuló los cargos para los seis procesados. Cambió el delito de tráfico de influencias a asociación ilícita. 

En la audiencia explicó que hubo “confluencia de voluntades” para manipular el concurso de jueces para la CNJ. Es decir, “se habrían asociado para cometer delitos”. Toainga señaló a Wilman Terán como el cabecilla de esta organización. 

En la audiencia de vinculación del caso Pantalla, el ex presidente del Consejo de la Judictaura, Wiman Terán, y la entonces jueza Anabel Torres fueron vinculados. Fotografía tomada de la cuenta X de la Fiscalía.

¿Qué dicen los testimonios anticipados?

El 2 de diciembre de 2024, tras la formulación de cargos, la Corte Nacional instaló la audiencia de recepción de testimonios anticipados del caso Pantalla, en la que la Fiscalía escuchó a cuatro personas: 

• Ex coordinador del despacho

El primer testimonio fue del entonces coordinador de despacho de la presidencia de la Judicatura —su nombre no ha sido revelado y tampoco está implicado en el caso Pantalla. 

Él dijo que entró a la institución en junio de 2023. Su jefe directo era Wilman Terán y sus funciones —por un sueldo de 1.500 dólares— eran manejar los correos institucionales, agendar citas, comprar pasajes. Pero dijo que su jefe lo trataba como “ignorante” y le decía que “no le servía”. 

En septiembre de 2023, cambió de cargo y fue designado como analista de Coordinación de Relaciones Internacionales dentro de la Judicatura. Esa dirección la manejaba Santiago Cifuentes, asesor de Terán, por lo que continúo haciendo tareas para el ex presidente del Consejo. 

El testigo contó que David Guzmán, entonces director general de la Judicatura, le pidió que contactara a una amiga suya, psicóloga, para que preparara a cuatro personas para el examen de confianza, entre ellas, Anabel Torres. Pese a que eso no estaba permitido en el reglamento del concurso, Guzmán le dijo que eso era “normal”. 

Además, el testigo dijo que Anabel Torres entraba a la Judicatura con “trato diferente”, es decir, sin registro de entrada. En el edificio de la Judicatura, en el norte de Quito, ella y Terán mantenían reuniones privadas. 

También señaló que Wilman Terán tenía un troll center llamado ‘El Ejército invisible’, que era usado para difundir audios y videos falsos, chats creados para generar supuestas conversaciones con políticas, fiscales, asambleístas. Lo que buscaba era popularidad en redes sociales. 

• Ex director general de la Judicatura

El segundo testimonio fue el de David Guzmán, entonces director general de la Judicatura, implicado en el caso Pantalla. 

Él dijo que desde el inicio de sus funciones, la administración fue problemática. Dijo que hubo reparto de cargos, algunos a “personas que mantenían relaciones sentimentales” con Terán. 

Guzmán dijo que Anabel Torres, quien en ese entonces era jueza de Santo Domingo de los Tsáchilas, tenía la “extrema y total confianza” de Wilman Terán, tanto que incluso tenía injerencia en las decisiones de la Judicatura. En el Consejo de la Judicatura la conocían como alias Diamante. Terán la tenía guardada como contacto del celular con el nombre de ‘Agente’. 

Sobre el concurso de jueces, Guzmán confirmó que Terán tenía tres finalidades. 

• 1. Que Anabel Torres entrara como jueza de la Corte Nacional. 
• 2. Tener la mayor cantidad de vacantes ocupadas con magistrados alineados a él. “Si [Gustavo] Jalkh pudo, ¿por qué yo no?”, repetía Terán —Jalkh fue presidente de la Judicatura durante el gobierno de Rafael Correa. 
• 3. Cumplir favores políticos. 

Sobre la jueza Anabel Torres, Guzmán dijo que ella no aprobó el primer examen de confianza para el concurso y que Terán  dispuso alterar el resultado. Pero no sabían cómo. 

Entonces, buscaron la justificación para tomarles un segundo examen de confianza. En una rueda de prensa, Guzmán dijo que hubo problemas informáticos en el desarrollo del primer examen y que por eso debían repetir. 

Sobre el examen práctico que le correspondía hacer a Torres, Guzmán dijo que había un plan para que Santiago Cifuentes lo hiciera en lugar de la jueza. Esa fue una disposición de Terán. 

• Ex asesor jurídico de la Judicatura

El tercer testigo fue Santiago Cifuentes, entonces asesor jurídico de Terán e implicado en el caso Pantalla. Él dijo que la estructura de poder dentro del Consejo de la Judicatura “se basaba en profundo temor” y que Terán les decía que todos estaban vigilados por agentes de inteligencia. 

Cifuentes también dijo que Terán tenía a su disposición a un grupo armado. 

Recordó que durante una reunión virtual del Pleno de la Judicatura, en la que se destituyeron a jueces que habían liberado a líderes de grupos criminales, Wilman Terán y su equipo —que incluía guardaespaldas, asesores, comunicadores— estaban en la provincia de Santo Domingo de los Tsáchilas. 

El testigo dijo que esa noche lluviosa —no precisa qué fecha— debido al peligro que suponía destituir a jueces corruptos, él sugirió pedir apoyo de la policía. Sin embargo, Terán decidió que su equipo se trasladara a una apiladora de cacao, un lugar apartado de la ciudad. En ese lugar, el ex presidente de la Judicatura “ordenó a los presentes [no precisa cuáles] que sacaran sus armas de grueso calibre y la sesión continuó en ese contexto”.

• Asesor de Wilman Terán

El último testigo fue Milton Herrera, entonces asesor de Terán. 

Él dijo que Terán exigió a David Guzmán que le entregara el banco de preguntas del concurso y también las respuestas para dárselas a Anabel Torres y a otros postulantes. Guzmán utilizó un programa de Inteligencia Artificial para contestar las preguntas, pero había errores. 

“Eso provocó la molestia y recriminaciones por parte de Wilman Terán”, dijo Herrera. 

También contó que en diciembre de 2024, poco antes de que Terán fuera arrestado en el caso Metástasis, encontró ocho sobres de manila en la mesa de comedor de la Dirección General de la Judicatura. Estos contenían las preguntas y respuestas del examen para el concurso de jueces de la CNJ. 

Horas más tarde, esos sobres estaban dentro del carro de Terán mientras él se iba al aeropuerto para su viaje a Guayaquil. En el camino, el ex presidente de la Judicatura entregó dos sobres a dos personas. También recibió una llamada. Cifuentes escuchó que Terán dijo: “Adicional a ellos, los sobres deben llegar a Guaranda y a Anabel Torres”. 

Sentencias y un juicio en proceso

El 25 de febrero de 2025 fue la audiencia de procedimiento abreviado contra David Guzmán, ex director general de la Judicatura. Este tipo de audiencia se da cuando el procesado acepta la culpa para recibir una pena menor y coopera con la Fiscalía

Él aceptó que permitió que se hiciera un segundo examen de confianza, pese a que no estaba contemplado en el reglamento del concurso.

Fue sentenciado a 6 meses de prisión por el delito de asociación ilícita. 

Al día siguiente, el 6 de febrero de 2025, fue la audiencia de procedimiento abreviado contra Milton Herrera y Santiago Cifuentes. 

Ambos aceptaron que obtuvieron el banco de preguntas de las pruebas teóricas del concurso. 

Herrera aceptó que presionó a funcionarios del Departamento de Tecnologías de la Información para que revelaran el mecanismo de cómo desencriptar esa información. Mientras que Cifuentes aceptó que rindió el examen escrito del concurso de jueces en lugar de Anabel Torres.  

Los dos fueron sentenciados a 6 meses de prisión por el delito de asociación ilícita. 

Juan Carlos Egas, ex director de Talento Humano, fue absuelto.

El 12 de junio de 2025, Wilman Terán y la jueza Anabel Torres fueron llamados a juicio, tras cinco días de audiencias. Él sigue preso; ella está prófuga. Aún no hay fecha para la audiencia. 

El 17 de junio de 2025, la Judicatura destituyó a Torres porque no ha asistido a trabajar más de cuatro días. Eso significa que cometió una infracción disciplinaria, estipulada en el artículo 109 del Código Orgánico de la Función Judicial, cuya máxima sanción es la destitución. 

Audiencia preparatoria de jucio en la Corte Nacional. Fotografía tomada de la cuenta de X de la Fiscalía.