Imaginemos que la crisis provocada por la pandemia de covid-19 ha sido una gran tormenta y que cada hogar la enfrenta en una embarcación diferente. Algunos lo han hecho en barcos grandes y cómodos, otros apenas en una canoa. Así, aunque la misma tormenta ha caído sobre todas las familias, algunas resultan mucho más afectadas. Eso es lo que ha sucedido durante estos dos años, y son los hogares con niños, niñas y adolescentes los más golpeados. 

A nivel global, al menos dos terceras partes de los hogares con niños han perdido ingresos desde que inició la pandemia. La oficina de Unicef para América Latina y el Caribe reportó que el 46% de los hogares con niños en la región solo tiene ahorros suficientes para cubrir sus necesidades básicas durante dos semanas o menos

En Ecuador, según la encuesta Encovid-Ec, realizada en febrero de 2022 con el apoyo de Unicef, la situación económica para las familias con niños no ha mejorado desde 2020: casi el 80% de los hogares reportó tener menos ingresos; mientras que esta cifra baja al 60% en los hogares sin niños. 

La pérdida de empleo también continúa afectando más a los hogares con niñas y niños: 52% , por encima del promedio nacional —43%—, y de los hogares sin niños —32%. 

Bajo la tormenta del covid-19, los medios de vida de estas familias pendieron y todavía penden de un hilo, limitando su acceso a la salud, la alimentación, la educación y la protección —todos derechos humanos. 

En el país, y de acuerdo con la misma encuesta, la inseguridad alimentaria —cuando no hay suficientes alimentos disponibles— no disminuye: está en un 48%, y esto aumenta aún más en los hogares con niñas y niños de estrato bajo: pasó de 68% en 2020 a 79% en 2022, y en el estrato medio bajo de 63% a 73%.

flecha celesteOTROS CONTENIDOS SOBRE DERECHOS DE LOS NIÑOS

En este tiempo, también se profundizaron las desigualdades en el acceso a la educación. En los hogares con niños de 5 a 11 años del nivel socioeconómico bajo, apenas el 10% tiene acceso a un computador, mientras que, en el estrato alto, el 74% sí lo tiene. Sin equipos es imposible estudiar de manera virtual o semipresencial para quienes tienen menos recursos. Por eso es tan positivo que la educación presencial se haya retomado. 

A pesar de los desafíos que enfrenta el sistema de salud por la pandemia, existen mejoras. El acceso a la vacunación infantil, según los resultados de la encuesta de febrero de 2022, superó el 90% en los hogares de estrato bajo que sufren inseguridad alimentaria severa. En el país, más hogares con niños y niñas están cubiertos por algún programa social —que son fundamentales para que las familias puedan salir a flote. Los beneficiarios pasaron del 20% en 2020 a casi el 40% en 2022. Es importante redoblar esfuerzos para que las ayudas económicas lleguen sobre todo a quienes más lo necesitan. 

A dos años de la pandemia, los niños, niñas y adolescentes siguen siendo los más afectados por la crisis del covid-19, especialmente los de las familias más vulnerables. 

Este no es el momento de recortar el apoyo, sino de invertir todos los recursos posibles en la niñez y adolescencia. Si salvamos el barco de los niños, niñas y adolescentes también estaremos protegiendo el presente y futuro del Ecuador. Por eso hago un llamado a la comunidad internacional, a la empresa privada, al Estado y a la sociedad para que nos unamos en ese objetivo común de salvar el barco de la infancia. Cuentan con Unicef. 

Luzangela Unicef 150x150
Luz Ángela Melo
Representante de Unicef Ecuador

VER MÁS CONTENIDO SIMILAR