En el debate obligatorio organizado por el Consejo Nacional Electoral, la candidata presidencial Ximena Peña, de Alianza País, dijo que “uno de cada 2 niños de la ruralidad tienen desnutrición crónica infantil y son los que no tienen agua potable”. La afirmación es cierta.
En Ecuador, uno de cada cuatro niños menores de cinco años y uno de tres niños menores de dos años tiene desnutrición crónica. En el sector rural, uno de cada dos niños tiene desnutrición crónica, y el indicador pasó de 31,9% a 28,7% entre 2014 y 2018, según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) 2018 del Instituto Ecuatoriano de Estadística y Censos (INEC).
La cifra también fue confirmada por Alejandra Cárdenas Reyes, Docente Universitaria y Defensora de Derechos.
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El INEC define a la desnutrición como un estado patológico que resulta de “una dieta deficiente en uno o varios nutrientes esenciales o de una mala asimilación de los alimentos”, en base al glosario de términos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
