Doce días duró el paro nacional en el Ecuador. Cada jornada fue distinta. Pero todas amanecían pacíficas y, en el día, la violencia escalaba. Esta es una selección de fotografías del 9, 10 y 11 de octubre de 2019.
9 de octubre
A las 11 de la mañana estaba convocada una rueda de prensa de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador. Pero minutos antes de que empezara, circuló un mensaje de que se cancelaba. En lugar de la conversación con los medios, los dirigentes indígenas se sumaron a la marcha que salió de la Casa de la Cultura y siguió la ruta que sigue casi todas las marchas en Quito: avanzó por la avenida la Prensa y viró por la avenida 10 de Agosto. Pero cuando llegó a la boca del centro histórico, se dispersó en calles paralelas y perpendiculares a la Guayaquil.
Un manifestante entrega ramas de eucalipto a los indígenas que llegaron desde diferentes provincias del país. Fotografía de José María León.
Vendedores de máscaras en la manifestación. Fotografía de José María León.
Un manifestante toma una siesta. Fotografía de José María León.
Un manifestante carga una televisión haciendo alusión a los medios y su cobertura. Fotografía de José María León.
Luis Macas, líder del movimiento indígena, participó en la manifestación. Fotografía de José María León.
Un grafiti en una de las calles por donde avanzaba la marcha. Fotografía de José María León.
Un manifestante indígena usa un cuerno durante la marcha. Fotografía de José María León.
Una señora regala agua a los manifestantes que pasan por la calle donde queda su casa en el centro de Quito. Fotografía de José María León.
Un grupo de manifestantes indígenas se moviliza en una camioneta por el centro de Quito. Fotografía de José María León.
Un grupo de policías en caballos atraviesa un puente en el centro de Quito. Fotografía de José María León.
10 de octubre
Un ciudadano ve de lejos los enfrentamientos entre manifestantes y la policía. Fotografía de José María León.
La mañana, tarde y noche del 10 de octubre, indígenas se reunieron en el ágora de la casa de la cultura en una asamblea para conversar sobre sus pedidos al gobierno nacional. Fue una jornada tensa. Durante un par de horas, policías estuvieron retenidos dentro del ágora y líderes indígenas amenazaron con practicarles justicia indígena por la represión que los uniformados habían ejercido durante las marchas. En un momento de la mañana, los líderes que hablaban desde la tarima del ágora —donde estaban cerca de 10 mil personas con sus banderas arcoíris, lanzas y palos— dijeron a los periodistas presentes que debían transmitir «la verdad de lo que estaba pasando». Ese comentario, sumado a que un periodista que intentó salir del ágora fue impedido, llevó a que se filtre el mensaje de que había 27 periodistas secuestrados por los indígenas.
Líderes indígenas convocaron a una asamblea en el ágora de la Casa de la Cultura donde llegaron cerca de 10 mil personas. Fotografía de José María León.
Manifestantes indígenas se reunieron en el ágora de la Casa de la Cultura. Allí condenaron la violencia que había dejado, hasta ese día, cinco muertos. Fotografía de José María León.
En el ágora de la Casa de la Cultura los manifestantes gritaban cuando los líderes, desde la tarima, reclamaban la derogación del decreto 883. Fotografía de José María León.
11 de octubre
En el octavo día del paro nacional, la violencia solo aumentó. Los manifestantes, como en los días anteriores, estaban en el parque El Arbolito y el parque El Ejido. Algunos intentaban subir la calle que lleva hasta la Asamblea Nacional donde un grupo de policías bloqueaba el paso. En el caos se mezclaron las bombas lacrimógenas, los heridos, las brigadas médicas, y las personas que solo observaban el enfrentamiento entre manifestantes y policías pero no participaban.
Con rocas que sacaron de construcciones aledañas, manifestantes bloquearon la avenida 6 de Diciembre. Fotografía de José María León.
Las piedras del bloqueo. Fotografía de José María León.
Un helicóptero sobrevuela la Asamblea Nacional durante la manifestación. Fotografía de José María León.
En diferentes partes de la avenida 6 de Diciembre manifestantes prendieron fuego a llantas y palos. Fotografía de José María León.
Ciudadanos forman un cerco para que las brigadas médicas puedan atender a los heridos de la protesta. Fotografía de José María León.
Un manifestante afectado por el gas lacrimógeno es atendido por brigadistas médicos quienes le echan bicarbonato de sodio. Fotografía de José María León.
Un periodista extranjero se echa bicarbonato de sodio para aliviar el ardor causado por el gas lacrimógeno. Fotografía de José María León.
Manifestantes arrancaron ramas del parque El Ejido para quemarlos y bloquear más calles. Fotografía de José María León.
Un brigadista lleva una bandera para que los manifestantes sepan que esa es una zona de paz donde brindan atención médica. Fotografía de José María León.
Manifestantes empujan un baño portátil para usarlo de barricada en la protesta. Fotografía de José María León