Es feminista por convicción y acción política, gracias a una familia de izquierda libre de religiones y de ser parte del activismo por la igualdad de las mujeres. Su primera profesión fue Comunicadora que en la marcha se ha fusionado con Género, Desarrollo, Juventudes, Políticas Públicas y Educación Sexual, por un afán de sentirse siempre estudiante. Trabaja por los derechos de las mujeres desde hace 20 años, desde la Fundación Sendas. Trabaja para lograr una verdadera autonomía y libertad, la suya y la de todas las mujeres y los hombres que cruzan su vida.