El cuidado del medioambiente es un tema que le compete a toda la gente del mundo, sin distinguir edades. Es por eso que la conciencia ambiental puede estar presente desde la niñez, debería seguir hasta la adolescencia y la adultez. No obstante, la etapa formativa temprana es la más importante para aprender a cuidar el medioambiente.
Según Unicef, “la crisis climática, la degradación del medioambiente y la biodiversidad son amenazas existenciales para la capacidad de los niños y niñas de sobrevivir y prosperar” y es por eso que es importante resaltar la educación ambiental desde que son pequeños.
La educación ambiental es importante porque aumenta la conciencia y el conocimiento sobre estos temas, y prepara a los niños y adolescentes para enfrentar los efectos del cambio climático, como menciona Unicef.
Te dejamos una lista de consejos para que los niños y niñas aprendan a cuidar el medioambiente.
Adecuar los temas a los niños
María Elena Ordóñez, educadora de escolares y fundadora de Arcandina —programa que promovía la educación ambiental y ciudadana—, dice que es muy importante “difundir la información de acuerdo a cada edad”. Para los más pequeños un conocimiento muy básico y sencillo y, mientras van creciendo, ampliar esta información.
Ordóñez también destaca la importancia del enfoque integral cuyo objetivo es sentir, ver y percibir “que somos parte de la naturaleza”. Para hacer la conexión con su cuidado.
La especialista enfatiza que es importante partir de que el ser humano ha causado mucho daño y conservar ya no es suficiente, sino que es necesario restaurar. Un concepto que los niños deben entender desde pequeños.
La participación de los niños y adolescentes —de diferentes edades— en campañas de concientización ambiental o mingas son muy importantes porque motivan a los chicos a entender que pueden hacer algo para aportar al cuidado ambiental.
Los niños que viven en zonas rurales no tienen las mismas condiciones que los niños que viven en la ciudad. Tienen algo muy valioso: el contacto directo con la naturaleza. Desde pequeños ya conocen de dónde vienen los alimentos y la importancia del cuidado de la naturaleza que los rodea.
María Elisa Campos, presidenta ejecutiva de SICMA Ecuador —una iniciativa de educación ambiental a nivel empresarial y colectivo— dice que los niños de 3 a 5 años de las zonas rurales “reconocen de dónde vienen sus alimentos porque están cerca de la agricultura y de los animales, a diferencia de los niños de las ciudades que para ellos todo viene empaquetado y listo”.
Los temas para los niños de la ruralidad y de centros urbanos no varían, lo que cambia es la forma de contarlas. Estos son los temas de medioambiente que deberían saber los niños, de acuerdo a su edad, según las especialistas.
De 3 a 5 años de edad
Es la edad de la maravilla. Todo les llama la atención y hay que aprovechar eso. Surgen los por qué y las curiosidades del entorno porque comienzan a palpar las cosas y usar sus sentidos para identificarlas. Algunos temas importantes para tratar en estas edades:
- Separar la basura: Todo tiene un lugar y hay cosas que se pueden tirar en el jardín (cáscaras de frutas) que sirven para alimentar a las “plantitas” y otras que no.
- Reciclar: El papel y cartón donde hacen sus dibujos deben ir en recipientes distintos.
- Cuidar a sus mascotas: Ser responsables con los animalitos que tengan, enseñarles que no se les puede pegar o incomodar.
- Cuidar las plantas: Regarlas, dejarlas crecer; es decir, no arrancarles las hojas, tallos o quitarle las flores.
- Comida: No tirarla en el suelo ni arrojarla fuera de la mesa.
De 6 a 9 años de edad
Es la edad donde empiezan a ser más independientes, pero también empiezan los temores y el miedo. Algunos de los más comunes son la oscuridad, los “monstruos” que en ella se ocultan, así como el temor a estar solos. Los niños ya tienen conocimientos previos básicos de algunos temas para cuidar el medioambiente pero profundizarlos es importante.
Algunos temas para explicar son:
- Tierra: Todo viene de la tierra, los productos que consumimos y usamos. Hay que cuidarla porque es nuestro hogar.
- Materia prima: Explicarles que existen productos que tienen que pasar por un proceso para conocer cómo se hacen. Un ejemplo de ello es que entiendan que el papel viene de los árboles.
- Material de los juguetes: Todo está hecho de un material y su producción ha generado gases de efecto invernadero. Es decir, gases que contaminan la atmósfera. Explicar a los niños los impactos del plástico y de las baterías de los juguetes a control remoto también es importante. Se puede preguntar: ¿Vale la pena invertir en ese juguete? ¿De verdad lo quieres sabiendo todo lo que conlleva hacerlo?
- Ahorro del agua: El agua no es infinita. Y es necesario no gastarla cuando se lavan las manos, bañan, riegan el jardín o ayudan a lavar el auto. Los páramos, que son la fuente de agua de muchas ciudades, están en peligro por el cambio climático. Explicarles esto puede ayudarlos para que cuiden el recurso.
- Ahorro de energía: La energía eléctrica se puede producir de distintas formas, unas que son más amigables con el ambiente y otras que no. Sin embargo, la energía se genera por medio de la combustión y esto provoca dióxido de carbono que provoca contaminación. Enseñarles a apagar las luces o aparatos electrónicos en casa cuando no se usan es importante.
- Compostaje doméstico: No es necesario comprar absolutamente todo en el supermercado. Empezar un pequeño huerto en casa e involucrar a los niños permite conectarlos con la naturaleza de los alimentos.
De 10 a 14 años de edad
Es la edad donde empieza el deseo por ser un héroe o heroína y lograr algo. Es importante motivar la investigación de temas de su interés y también hacer énfasis en que con pequeñas acciones pueden realizar cambios importantes.
Opciones de temas para explicar:
- Tecnología: Todo está al alcance de las redes y buscadores como Google, motivar a los niños a buscar los materiales de lo que están hechos sus juguetes y los impactos en el medioambiente.
- Contaminación de aguas: Todos los residuos líquidos terminan en los ríos y estos en el océano. Es importante resaltar la importancia de no botar basura a los ríos y lo que esto provoca en las especies marinas. La pérdida de hábitat y entrar en peligro de extinción son algunas de las consecuencias directas en las especies.
- Sostenibilidad: Mantener el equilibrio, es decir, no consumir demasiado o en exceso y comprometer a las futuras generaciones a no hacerlo.
- Reciclar: Que se involucren de manera activa en separar los materiales de plástico, cartón, vidrio, latas, papel, compost y no reciclables.
- Restaurar: Participar en campañas para replantar en un sitio que ha sido deforestado o en mingas de recolección de basura.
Es importante hablar sobre estos temas en casa porque hablar de educación ambiental, según María Elisa Campos, permite que el niño a futuro no tenga que preocuparse por temas como migraciones por la crisis ambiental.
María Elena Ordoñez complementa esto diciendo que el objetivo de este tipo de educación, desde la formación, es que el niño no crezca pensando que tiene que hacer todo esto del cuidado ambiental para resolver lo que las demás generaciones hicieron, sino que entienda que es parte del cambio y que aún estamos a tiempo.
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