Algunos sismos, como el de la mañana de hoy —15 de enero de 2021— se perciben, pero no causan daños materiales. Otros, dependiendo de su magnitud, pueden destruir edificaciones o devastar varios kilómetros de áreas pobladas y matar a miles de personas. Por eso es importante saber cómo actuar antes, durante y después de un temblor. 

La prevención es clave

Es necesario estar siempre preparado porque no existe una manera de predecir un sismo. 

El Instituto Geofísico de la Universidad Politécnica Nacional del Ecuador recomienda determinar los objetos que pueden ser un peligro durante un terremoto. Por ejemplo, cuadros, espejos, macetas o lámparas. El Geofísico dice que se deben reubicar o asegurarse de manera que no puedan caerle encima a alguien durante un sismo. 

El Geofísico sugiere que siempre se tenga a la mano una mochila con una radio portátil, una linterna con pilas, un botiquín de primeros auxilios, un pito, una copia de los documentos personales y una lista de teléfonos de emergencia. Además, se debe tener botellas de agua, alimentos enlatados, abrelatas y granos secos. Ya que estamos en pandemia, el Servicio Nacional de Gestión de Riesgos y Emergencias del Ecuador (SNGRE) recomienda incluir mascarillas, guantes, alcohol o gel antibacterial. 

El SNGRE también dice que se deben hacer simulacros que involucren a toda la familia para saber en qué lugar es seguro ubicarse durante el sismo. El Geofísico dice que lo mejor es refugiarse bajo una mesa o un escritorio fuerte. Además, se deben identificar con anterioridad las zonas seguras, albergues y refugios cercanos para poder acudir a ellos en caso de necesitar ayuda. 

Durante el sismo

El consejo del Geofísico es “échese al piso, cúbrase y agárrese”. Lo ideal es que en apenas dos pasos puedas encontrar refugio en un lugar seguro y resistente. Si no hay una mesa o un escritorio cerca, es importante cubrirse la cara y la cabeza con los brazos y agacharse lejos de ventanas y estanterías. 

El Servicio de Riesgos dice que se debe mantener la calma, cubrirse y agarrarse de una mesa que sea segura. No hay que correr mientras la tierra se esté moviendo. En caso de estar en la calle hay que alejarse de árboles, edificios, postes y cables eléctricos. En un lugar concurrido, como un restaurante o un cine, las personas se deben quedar donde están. El Geofísico aconseja alejarse de las repisas que contengan objetos que puedan caer y mantener la calma. 

En los carros en movimiento se debe parar apenas sea posible y quedarse dentro del vehículo hasta que pase el temblor. Tampoco hay que estacionarse cerca o debajo de edificios,  árboles, puentes o cables eléctricos. Una vez que el movimiento termine, el Instituto sugiere avanzar “cautelosamente, observando la carretera y los puentes para ver si tienen daños”. En caso de abandonar el vehículo, es importante estar pendiente de los objetos que pueden caer. 

Cuando deje de temblar

El Instituto Geofísico dice que vendrán réplicas. Si el lugar en el que una persona se encontraba fue afectado por el primer sismo, se debe evitar volver ahí. Las réplicas normalmente son de menor intensidad, pero pueden ser suficientemente fuertes para causar daños más graves a estructuras debilitadas. Las personas pueden ir a las zonas seguras o a los puntos de encuentro antes identificados. 

En caso de quedar atrapado entre los escombros en sismos de mayor intensidad, no hay que moverse. Es importante cubrirse la boca con un pañuelo o la ropa y no gritar, al hacerlo se puede tragar cantidades peligrosas de polvo. El Geofísico también sugiere no encender fuego. Si tiene un pito, hay que usarlo. En caso de no tenerlo, se pueden dar golpes en las tuberías o en la pared para que los rescatadores puedan encontrarlo. 

Por años ha circulado en internet el “triángulo de la vida”, un método que sugería ubicarse en los espacios entre objetos que podrían ser aplastados si colapsa un edificio. El Instituto Geofísico confirmó que podría ser peligroso porque hace varias suposiciones incorrectas.  

La institución aclaró que los edificios no siempre se derrumban y aplastan a todos los muebles en el interior, los residentes no pueden anticipar cómo se van a derrumbar y localizar los espacios seguros, y que durante los temblores fuertes las personas no podrán moverse al lugar deseado. Otras de las medidas que circulan por internet desmentidas y no recomendadas por el Geofísico es abandonar el carro durante un terremoto y acostarse al lado. Es imperativo informarse de fuentes oficiales para evitar cometer errores que podrían ser peligrosos y hasta mortales.