La ministra de Gobierno, María Paula Romo, dijo el 29 de abril que ya hay algunos cantones que han decidido cambiar el de su semáforo de movilidad color de rojo a amarillo. Pero el Comité de Operaciones de Emergencia (COE) nacional todavía no ha sido informado formalmente de esa decisión. 

Romo aseguró que a pesar de las declaraciones y mensajes de los alcaldes en redes sociales, las decisiones no se harán oficiales hasta que se envíen los comunicados oficiales al COE. Los alcaldes deberán avisar cualquier cambio al COE nacional con 48 horas de anticipación. Para que entren en efecto el 4 de mayo, tienen hasta el sábado 2 para dar aviso. 

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Según el COE, en los cantones amarillos se autorizará la atención de consulta externa para todas las especialidades médicas. El toque de queda será desde las 6 de la tarde hasta las 5 de la mañana, dice el protocolo. El transporte urbano interparroquial deberá usarse con un máximo del 30% de su capacidad y los vehículos privados podrán circular dos días a la semana, según el último dígito de su placa. Las actividades comerciales en locales, explicó Romo, podrán funcionar con un aforo del 30% de su capacidad. 

La ministra Romo aclaró que aunque los alcaldes serán quienes tomarán la decisión de cambiar de color, no se les está dando competencias que no les corresponden o que pertenecen al gobierno. “Hay que compartir la decisión sobre en qué momento está cada circunscripción”. Con la información entregada a cada cantón, el COE sugerirá y los alcaldes decidirán. 

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Es necesario considerar todos los datos presentados en los informes, dijo Romo. Según la Ministra, hay algunos indicadores de presión como las cifras de violencia intrafamiliar o las infracciones. Sin embargo, Romo aclaró que los más importantes son los indicadores de salud. 

Aunque la economía del país es precaria, todos los Municipios tendrán los recursos para manejar la emergencia, dijo Romo. El dinero ya se está entregando, pero se dará prioridad a los que menos presupuesto tienen. “Todavía hay algunas transferencias pendientes”, confirmó Romo. Además, el Banco de Desarrollo del Ecuador habilitó una línea de crédito de 10 millones de dólares para los Municipios que necesiten recursos extras. 

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Incluir a los Municipios en la toma de decisiones se hizo para “evitar cualquier conflicto con el semáforo”, dijo Romo en la rueda de prensa. Explicó que sería “muy grave” que el gobierno dé una indicación y luego las autoridades locales den otra. Durante la crisis, se necesita trabajar en equipo, dijo Romo, y por eso el gobierno decidió no imponer el grado de reactivación de la economía en cada cantón.