El alcalde de Quito, Jorge Yunda, declaró en emergencia a la capital por las protestas. En una rueda de prensa, Yunda dijo que no se podía tolerar porque producen “graves pérdidas”.

La declaratoria estará en vigencia hasta que dure el estado de excepción decretado por el presidente Lenín Moreno (30 días, según el mandato de la Corte Constitucional). Yunda llamó a los alcaldes para que hagan de mediadores “entre los dirigentes de la paralización y el Gobierno para buscar soluciones conjuntas”.

El martes 8 de octubre, ocho concejales de Quito se pronunciaron en una rueda de prensa sobre los hechos ocurridos en la ciudad. Luz Elena Coloma leyó un manifiesto en el que defienden el régimen democrático y exigen al alcalde Jorge Yunda sumarse a una “postura clara y firme en defensa de la democracia”. Además, pidieron al alcalde que disponga que las dependencias municipales presten su contingente para garantizar la seguridad de los quiteños.  

Los concejales condenaron a “los actores políticos que promuevan el caos”. Bernardo Abad, concejal de Quito, cuestionó la reciente reunión a la que convocó el alcalde, pues debía realizarse “desde el día en que Quito estaba en riesgo”.

Por otro lado, el exalcalde de Guayaquil, Jaime Nebot, llamó a defender “unidos la democracia, nuestras ciudades, nuestras familias, y nuestros bienes”. A través de un mensaje radial, dijo que varios individuos intentan tomarse la ciudad de Guayaquil para “caotizarla y realizar actos vandálicos”. “En estos momentos todos nuestros logros peligran”, dijo Nebot.