Ricardo Pita está al otro lado del teléfono, son las siete de la mañana y acaba de lanzar un nuevo sencillo. Con la voz ronca, habla de su recién nacido tema, El Tren. “En parte es una historia imaginaria”, dice el compositor nacido en Guayaquil, pero a quien le cuesta quedarse quieto en un solo lugar, en una sola ciudad. “La viví cuando estuve por Buenos Aires observando una interacción en el subte, el tren”, dice en referencia al metro de la capital argentina. “He evitado caer en ese tipo de composiciones, porque prefería hablar de un amor más universal, pero sí, El Tren es una canción de amor”. Su primera canción de amor.
Musicalmente, también es un cambio. En El Tren, por su estructura melódica, Pita se aleja de su afinidad por el folclor, los sonidos tropicales y las canciones hechas a base de voz y guitarra que escuchamos en producciones pasadas. Este tema, por el contrario, se deja llevar por la batería y explora en el terreno de lo indie. Ricardo Pita dice que su gran referencia fue Alex Turner, un músico romántico e indie rockero, parte de las bandas The Last Shadow Puppets y Arctic Monkeys. El Tren va hacia el new wave, el post punk. El Tren, también, en sus inicios fue un tema de folclor, “pero, ya que líricamente era un tema del que no había hablado, me dio gusto buscar otro camino para la canción, así que nos fuimos hacia lo indie”, dice Pita.
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Este es el tercer adelanto del nuevo disco de Pita, llamado La Casa Rodante
Su nuevo disco se empezó a grabar en España. Recorrió con Pita, sus zapatos viejos y su libreta, países como Brasil, Chile y Argentina. Imagínense que su tercer disco será como el álbum de fotos de este viaje. Habrá diez paisajes hechos canción. “Cada tema es como una nueva estación con nuevos personajes. El hilo conductor es la carretera, pero son paisajes bastante distintos los que se ven”. Ricardo Pita asegura que el disco saldrá en diciembre de 2019 y que presentará un par de sencillos más hasta su lanzamiento. En su portada, diseñada por Ivis David Flies, se ve a Pita bajo colores del atardecer, un vehículo y un camino por recorrer.
Esta es la portada de su tercer disco.
En La Casa Rodante Ricardo Pita abraza a “el cantante buena onda”
El público le puso ese apodo cuando Pita sacó Las Aventuras de Ayer, Hoy y Siempre (2013), su primer disco como solista (fan fact: Ricardo Pita formó parte de la banda de culto Niñosaurios y debutó como solista con ese disco, lleno de canciones coloridas y esperanzadoras). En Amuelto (2016), Pita quiso demostrar que también puede hablar de su lado oscuro. Pero por temas que repetían que “la vida es buena de verdad”, el público lo dejó en esa categoría bonachona que, en un principio, le molestaba mucho. “No me gustaba que me encasillen. Pero ahora me gusta que me reconozcan como alguien que hace canciones que le hacen bien a la gente” dice el cantante de 40 años. “Para La Casa Rodante, elegí 10 canciones que, de principio a fin, te hacen bien. Me imagino a la gente escuchándolo en la carretera, con una sonrisa en la cara yendo rumbo al mar”, dice Pita.
El cantautor comenta que también habrá temas en los que se lo escuche jugando con la electrónica. “El productor Miguel Sevilla (Rocola Bacalao) ha llevado al disco a otros rumbos de los que estaba acostumbrado”. Hay un aire de son cubano mezclado con bolero en Zapatos Viejos (presentado en junio de 2019), una canción que nos deja bastantes pistas de lo que sintió Pita al componer este disco: “zapatos viejos, cuánto han caminado, espero no volver a saber lo que es el dolor”. En esta canción brilla el solo de piano de Sevilla. Junto a El Sueño (el primer adelanto, presentado en marzo de 2019 de La Casa Rodante) suman 3 sencillos de la nueva colección de Pita.
En su tercer álbum, además, encontraremos colaboraciones con músicos locales, que Pita revela aquí: el icónico Viejo Napo (Héctor Napolitano), y la cantautora –también guayaquileña, pero radicada en Quito– Paola Navarrete.
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De nuevo, habla del juego que hay en el arte de componer. En el tema que colaboró con el Viejo Napo, por ejemplo, en vez del güiro, utilizó una botella de whisky, después de brindar en plena grabación. Nico Saba, cantante de la banda peruana Kanaku y el Tigre, también se sumó a este viaje de Ricardo Pita, quien no ha dejado de caminar, de viajar, de componer. Y está formando un disco que será como postales de sus viajes para quienes lo escuchen. La camaradería, la amistad, el amor en sus distintas formas y un caminante incansable que le canta a sus vivencias marcarán el tono a su tercera producción de estudio.
Escucha sus nuevos sencillos aquí:
