En un principio, se anunció que los problemas se debían a actualizaciones en el sistema. Los comentarios de redes sociales que decían que los inconvenientes habrían estado relacionados con supuestos problemas de solvencia del banco, fueron tajantemente desmentidos. Marcos López, delegado del presidente Lenín Moreno ante Junta de Política y Regulación Monetaria y Financiera, dijo que «no es un problema de liquidez ni de solvencia del banco Pichincha, es un disco duro que se ha dañado». 

La superintendenta de Bancos, Ruth Arregui Solano, confirmó la tarde del miércoles 14 —durante una rueda de prensa en Guayaquil— que los problemas en el sistema del Banco Pichincha se debían a daños tecnológicos. “Es un daño muy puntual”, dijo la Superintendenta, “no tiene nada que ver con los temas de solvencia ni del Banco del Pichincha ni del sistema financiero”. 

Arregui explicó que la “supervisión en campo” no ha terminado, así que identificar el origen y la causa del daño todavía no es posible. También reconoció que “rutinariamente tenemos ataques de hackers”, así que no se ha logrado identificar si la situación se originó por algún tipo de irrupción maliciosa. Si ese fuera el caso, dijo que acudirá a la Fiscalía.