*Este texto se hizo con la asistencia de los alumnos de economía de la USFQ Camila Procel y Mateo Padilla

¿Cuál es el programa económico de Lenín Moreno? La verdad es que no lo sabemos: su programa electoral (como está en la web de Alianza País) es básicamente una serie de frases cursis y vacías que no concretan absolutamente nada y que en materia económica no sirven para absolutamente nada como guía a los electores. Frases como Unidos somos invencibles o Amamos la vida y por eso votamos por la vida. Queremos ganarnos la vida…, ¡Es hora de consolidar un país políticamente maduro, integral y soberano! (por poner sólo algunos ejemplos pues todo el programa es de ese tenor) pueden ser útiles como propaganda, pero no son, desde luego, un programa propiamente dicho. Así que el candidato Lenín Moreno comienza incumpliendo uno de los primeros compromisos de una democracia madura: presentar un programa electoral que sirva de guía para los electores y de compromiso para los elegidos.

En el “plan de trabajo” presentado al Consejo Nacional Electoral en 88 páginas se desarrolla esa retórica —más propia de un panfleto que de un  programa— como, por ejemplo, “no creemos en la jaula de hierro del consumismo”. Se sigue anunciando el cambio de la matriz productiva, pero no se dice por qué no se ha producido en estos diez años, ni exactamente qué se hará para lograrlo en los próximos cuatro.

Las pocas promesas electorales que se consiguen extraer del documento no se pueden cuantificar por indeterminadas. ¿Qué quiere decir exactamente “aumentaremos y orientaremos la inversión en  ciencia, tecnología e innovación hacia el cambio productivo”? (y eso escogiendo una de las pocas frases del documento que dice algo sustancial) ¿En cuánto se aumentará? ¿Para lograr qué?

En el documento se plantea que el “reconocimiento del trabajo de la mujer” que tendrá “afiliación a la seguridad social y compensación  económica” ¿Quién va a pagar a las amas de casa? ¿El Estado? ¿Cuánto al mes? Nada de esto se dice. Se insiste en que se “Promocionará la producción nacional en el mercado interno”, pero para eso mismo se crearon las salvaguardias que ahora también se prometen eliminar. Todo está lleno de frases grandilocuentes pero vacías como “El mercado es un buen sirviente pero un pésimo amo” de Karl Polanyi, el único autor citado (lástima que los autores del documento no leyesen más a su hermano Michael, que les hubiese enseñado lo importante que es la libertad y en especial para la ciencia). Se anuncia que “aplicaremos el mecanismo de control y salida de capitales” cuando ya existe un impuesto del 5% a la salida de divisas y apenas hay inversión extranjera en Ecuador, otra línea vacía pero que añade incertidumbre sobre el sistema. Se dice, también, que “Potenciaremos el “dinero móvil” —se supone que hemos de entender el “dinero electrónico del Banco Central”— pero no se nos dice cómo, sobre todo después de tres años de rotundo fracaso porque los ecuatorianos no lo quieren usar, ni qué harán de distinto ahora.

A todas estas incertidumbres hemos de añadir la mayor de todas: la posición del candidato Lenin Boltaire Moreno Garcés sobre la dolarización. A veces afirma que se trabajará por lograr una “moneda propia”, a veces afirma que se mantendrá la dolarización. Una y otra son incompatibles. Estas contradicciones se repiten y repiten. Muestran que el programa es fruto de la improvisación y no de una planificación seria.

El plan económico de Moreno contiene algunas afirmaciones simplemente falsas. Por ejemplo: “esta desigualdad se constata con la presencia del ser humano más rico en nuestro continente y el más pobre en términos de privaciones”. El ser humano más rico, según la lista Forbes del 2017 no es latinoamericano sino norteamericano (Bill Gates); el  primer latinoamericano está en el quinto lugar (Carlos Slim), el siguiente en el 22. De hecho sólo hay 7 latinoamericanos (ojalá hubiese muchos más). El ser más pobre evidentemente se estaría muriendo de hambre, algo que por fortuna ya no ocurre en la región.

En materia de comercio se promueven los acuerdos con el sur, pero no se hace mención alguna al ALBA, al Mercosur, o algún organismo en concreto. Es decir, se vuelve a dejar el programa en mera palabrería incomprobable.

Como en el plan de gobierno no hay nada sustancial, para saber lo que propone Lenín Moreno para la economía ecuatoriana hemos de ir a sus declaraciones en campaña. Éstas no presentan una propuesta coherente, articulada y sólida. Es todo lo contrario: palabrería edulcorada, improvisada y hueca, adornada con muchas promesas de gasto pero sin ninguna articulación de ingresos o de diagnóstico de la realidad económica del país. En definitiva, las declaraciones de Lenín Moreno son los eslóganes de un político desesperado por ganar unas elecciones pero no son, ni muchísimo menos, el plan de gobierno de un estadista ante un país en crisis.

Quizá deberíamos comenzar por su análisis de la situación del país, donde nunca ha pronunciado la palabra CRISIS (y sí, en Ecuador estamos en crisis), y sí se han repetido hasta la saciedad “los logros de la Revolución Ciudadana”. Lo que parece que pretende el programa económico de Lenín Moreno es incidir sobre el modelo del correísmo, y prometer más gasto por cerca de 9.695 millones de dólares anuales (una suma que hemos hecho basándonos en sus promesas de campaña), sin especificar de dónde se va a obtener ese monto.

Quizá la cifra de 9.695 millones de gasto más pueda sorprender a alguien, pero hemos leído todas las promesas de gasto hechas por Moreno y hecho un cálculo de cuánto costarían realmente cada una de ellas. Aquí pueden encontrar el detalle de los cálculos, que evidentemente son aproximados, pero que pueden servir para dimensionar la magnitud de lo prometido por Lenin Moreno:

  • TOTAL GASTO PROMETIDO POR MORENO:
    • Casas: 3.000 millones
    • Bono general: 730 millones
    • Bono ancianos: 490 millones
    • Universidades técnicas: 1.400 millones
    • Universidad Santo Domingo: 50 millones
    • Crédito jóvenes: 75 millones
    • Empleo jóvenes: 50 millones
    • Misión ternura: 600 millones
    • Refinería del Pacífico: 3.300 millones
    • TOTAL: 9.695 millones de dólares.

No ha hecho el señor Moreno ni una sola especificación de cómo piensa aumentar esos 9.695 millones de gasto prometido a un presupuesto que es ya de 29 mil millones (el de 2016 prorrogado al 2017 por ser año electoral). Esto implicaría un incremento en el gasto de un 33% sobre un presupuesto que ya tiene un déficit de 6 mil millones, que pasaría a ser de 15 mil millones —un 15% del PIB, algo completamente inasumible.

La triste verdad: a juzgar por lo inespecífico de sus propuestas, por lo variable de las mismas, y por lo poco concreto o articulado que están, es que el señor Moreno no tiene un programa económico que realmente se proponga para cumplir.  Lo que nos ha presentado son apenas promesas electorales para ganar votos, pero no compromisos para el manejo de la crisis que atraviesa la economía ecuatoriana.

Si llegase a ganar Lenín Moreno, la realidad sería mucho más tozuda que los deseos de los políticos en campaña electoral: el  modelo de gasto y despilfarro sin aumento de la producción ni la productividad que ha propuesto el modelo de la Revolución Ciudadana está quebrado, y si ganase Lenín Moreno no tendría más remedio que enfrentar la realidad. No se puede seguir “huyendo hacia delante” en esta avalancha de deuda cada vez mayor a la que nos ha abocado la Revolución Ciudadana, pues al final las deudas hay que pagarlas y los plazos vencen.

No, el señor Moreno no tiene siquiera un plan de gobierno. Es que ni siquiera tiene una idea real de cuál es la grave situación económica que atraviesa el país, y mucho me temo que es porque él mismo se ha creído su propia propaganda, se ha creído la retórica de frases cursis, grandilocuentes y vacías, con las que quizá se pueda construir un discurso político populista, un contador de chistes exitosos o una conferencia motivacional, pero desde luego no se puede aspirar a gobernar un  país.

 

***

Coste de las propuestas electorales de Lenín Moreno.

El programa de  Lenin Moreno no presenta ninguna cifra. Las pocos cifras que presenta en sus promesas de campaña muchas son increíbles (como pagar diez mil dólares por una casa unifamiliar de dos plantas) nos han servido para hacer aquí cálculos aproximados y contienen un amplio margen de error. Son criticables y corregibles. Además, los hemos hecho lo más simplificados posibles (dividiendo el gasto de manera uniforme entre los 4 años de legislatura sin tener en cuenta tipos de descuento, por ejemplo). Sin embargo, esperamos que puedan servir como una primera aproximación para saber, a grosso modo, cuánto gasto anual ha prometido el candidato Moreno.

Misión vivienda: 325 mil casas

Según esta noticia de El Telégrafo el candidato Moreno ha prometido 325 mil viviendas “dignas”. 191 mil serían entregadas de forma gratuita; las restantes 134 mil se pagarían a veinte dólares mensuales durante veinte años sin ningún tipo de interés. A partir de aquí los demás datos dados en la noticia se contradicen. Por ejemplo, en este otro vídeo dice que las cuotas serán de 20, 40 ó 60$.  

Se dice que las casas costarán 10 mil dólares, pero no parece razonable que ninguna casa tenga ese precio. De hecho en la propaganda se adjuntan fotos de unifamiliares de 2 plantas y tres habitaciones. Parece mucho más razonable calcular que pueden rondar los 40 mil. Hemos llegado a esta cifra tomando en cuenta el monto promedio que presta el BIESS (41 mil dólares) y considerando, además, el costo medio de construcción en 2012 era de 25 mil sin terreno en Manabí, una provincia donde la tierra no es cara. Se dice que “El Estado subvencionará el 50%”, pero el Valor Actualizado Neto del pago de 20 dólares mensuales sin tipo de interés durante 20 años, tomando una tasa de descuento muy conservadora para Ecuador del 5%, es de 3079 dólares. Si tomamos 40 dólares como media (si las casas se pagasen a 20, 40 ó 60$), serían 6151 dólares de valor actual a una tasa de descuento del 5%.

Por tanto, este programa tendrá unos gastos totales de (40 mil x 325 mil) 13 mil millones de dólares y unos ingresos de 790 millones de dólares (6.151x 134 mil = 824 millones). Esto supone un gasto comprometido de unos 12.176 millones de dólares (13 mil de gastos menos 824 de ingresos). Esto es 3.044 millones anuales cada año del presupuesto.

Aumentar el bono de desarrollo humano

Según esta noticia de El Telégrafo el candidato propone aumentar el Bono de Desarrollo Humano de 50 a 150 dólares mensuales. El presupuesto de Ecuador para el bono de Desarrollo Humano (según los mismos datos que da Moreno) es de 367 millones anuales. Según el candidato Moreno quiere aumentar el presupuesto en 150 millones más anuales y con eso pagar el aumento del triple del monto.

Es extraño que se prometa triplicar el monto pero que tan sólo se calcule que cueste un 40% más. Más bien se debería también triplicar el gasto. Esto suponiendo que se mantenga la misma cantidad de receptores, lo que en una época de crisis como la que estamos en Ecuador y con aumentos de la pobreza y la pobreza extrema en 2015 y 2016 más bien llevarían a pensar que más personas recibirán el bono, así como un principio de economía básico que dice que cuantos mayores sean los incentivos mayores serán quienes quieran recibirlos.

Por tanto, lo razonable es triplicar el presupuesto de 367 millones a 1100 millones con  un sobrecoste de 730 millones anuales, para poder triplicar el monto prometido.

El candidato Moreno también ha prometido duplicar la asignación a los ancianos, de 50 a 100$ mensuales, por un coste de de 410 millones de dólares

Según el reporte del IESS en Ecuador había en el 2014 unas 430.000 receptores de pensiones, de los cuales 302.000 correspondieron a la vejez. El gasto actual es de 300 mil receptores a 50 dólares al mes. Eso es 180 millones de dólares. Pero el candidato Moreno en sus vídeos promocionales anuncia que habrá 560 mil beneficiados, lo que daría 672 millones de dólares. Este sobrecoste de 672 millones prometidos menos los 180 millones de coste actual da un total de 492 millones: 80 millones más de los calculados por Alianza País.

Lenín Moreno ha prometido reiteradamente la creación de 40 universidades técnicas:

Según el candidato Moreno se crearán 40 universidades técnicas con 200 millones de dólares: un presupuesto de 5 millones de dólares por universidad, lo que es una cantidad evidentemente insuficiente. Recordemos que no estamos hablando de mantener universidades, sino de crearlas.  

Los costes de funcionamiento de las universidades técnicas del país son  muy superiores a eso. Aquí se puede ver: Universidad Técnica de Cotopaxi:  17 millones. Universidad Técnica de Manabí: 42 millones. Universidad Técnica del Norte: 34 millones. Universidad Técnica de Babahoyo: 25 millones. Universidad Técnica de Machala: 18 millones.

Si hacemos un cálculo similar (la Universidad de Yachay apenas recibe alumnos y las universidades técnicas deberán recibir más), el cálculo apropiado podría ser que cada universidad técnica gaste el doble durante los primeros años de funcionamiento (aquellos en los que tiene que construir los edificios para funcionar, que es el gasto fijo mayor); y tomando los presupuestos de las universidades más técnicas más modestas, podríamos calcular unos 35 millones anuales.

Esto es: 35 millones anuales por los primeros cuatro años de cada universidad técnica, por las 40 universidades técnicas prometidas: 1.400 millones de dólares. E insistimos: parece un cálculo muy conservador.

Propuestas en escuelas del milenio

Como el candidato Moreno ya ha criticado a las escuelas del milenio, y aún no ha dicho  nada de la educación primaria o secundaria en el Ecuador, parece que el sistema educativo seguirá como hasta ahora, pero no se alcanzará la cifra de escuelas del milenio prometidas.

Aunque en el año 2014 se prometieron construir 200 Escuelas del Milenio, en diez años de Revolución ciudadana tan sólo se han inaugurado 76, a unas 8 por año.

La mejor universidad de América Latina” en Santo Domingo.

Primero hay que tener en cuenta que la promesa de una “Mejor universidad pública” ya se hizo en las anteriores elecciones: era la Universidad de Yachay. Ésta tiene hasta ahora unos 850 alumnos, y muy pocos logros por presentar (no, desde luego, la supuesta alianza con Tesla).

No se entiende muy bien por qué hemos de creer en la propuesta de Moreno de la creación de “la mejor universidad de América Latina” en Santo Domingo de los Tsáchilas. En primer lugar, las mejores universidades suelen estar situadas en ciudades cosmopolitas, para poder atraer mejor talento. La mejor universidad de América Latina según los últimos rankings es la de Sao Paulo, que tiene un presupuesto de 1.200 millones de dólares (insisto, para seguir funcionando, no para ser creada y construir todos los edificios) y unos 96 mil alumnos (la cuarta parte de toda la población de Santo Domingo de los Tsáchilas).

No parece que el presupuesto que dota el señor Moreno sea realmente de esos 1.2000 millones de dólares. Pongamos que aspira tan sólo a una universidad “al menos mejor que la de Yachay” lo que sería más de esos 30 millones de dólares anuales; ¿pongamos 50?

20 mil créditos preferenciales para jóvenes de hasta 15.000 dólares al 2% de interés y a 10 años plazo.

Esta propuesta costaría dependiendo: si el tipo de interés referencial para “productivo PYMES” (que sería el que aplica, pero aún siendo primeros emprendimientos debería ser aún superior por el riesgo) es del 11,02% según la tabla del Banco Central (redondeamos el 11%). Esto supondría una una subvención de 9% anual. De tal manera que son 20 mil créditos a 15 mil dolares cadauno: 300 millones. El 9% son 27 millones de dólares anuales, que por los diez años del programa suponen 270 millones.

A esto hay que sumarle los créditos impagados, que en un sector de tanto riesgo como el crédito a jóvenes empresarios puede llegar al 12%.  Doce por ciento de 300 millones: 36 millones.

Total coste del programa: 306 millones en total, 75 millones anuales. (Esto es, costaría al Estado más o menos lo mismo que el volumen de crédito otorgado).

Además, el candidato prometió dedicar 500 millones de dólares a erradicar el desempleo juvenil. Entendemos que el plan de créditos mencionado anteriormente está en esa propuesta, por lo que los 200 millones restantes (en cuatro años son 50 millones anuales) son los que se dedicarían específicamente a generar nuevos puestos de trabajo. No se ha especificado ni en qué tipo de puestos de trabajo ni cómo se creará.

Una de las propuestas principales del candidato Lenin Moreno es la “Misión ternura” para atender los primeros mil días de los nacidos en Ecuador.

A pesar de que se promociona mucho la campaña, y de toda la palabrería utilizada, es difícil sacar datos concretos de la misma.

Se promete una consulta médica especializada durante todos los meses de embarazo. Tomando por promedio 50 dólares por consulta. Teniendo en  cuenta que en Ecuador se producen unos 70 mil nacimientos al año, el coste sería de 31,5 millones de dólares

Además se promete eliminar la desnutrición infantil. Suponiendo que eso se haga con un  complemento alimentario, y calculando a lo bajo que éste pueda costar de tres dólares diarios (una papilla de frutas por día) sería más o menos 90 dólares al mes por niño. Si hay 70 mil nacimientos al año, hay más o menos 210 mil niños de menos de tres años, así que el coste sería 226,8 millones de dólares. Eso sin tener en cuenta los mismos costes de gestión del programa (esto es, la logística de inscripción en el programa, de  distribución, etcétera).

La Misión Ternura también promete “cuidado en centros infantiles”. Crear miles de centros infantiles por todo el país sería una inversión milmillonaria. Calculando tan solo que sería para atender a los niños de 1 a 3 años en los centros ya existentes o de creación privada, y calculando una pensión media de 200 dólares al mes (pensión muy baja, pero por conceder el beneficio de la duda al candidato Moreno), el coste total sería de 336 millones de dólares.

En total la “misión ternura” comprometería, aproximadamente, 31,5 millones para las atenciones médicas, 226 millones para los complementos alimentarios, 336 millones para la atención en centros infantiles.: unos 593,5 millones.  (A efectos de cálculo aproximado redondeamos a los 600 millones)

La refinería del Pacífico:

Lenín Moreno dice que hay que continuar con la creación de la Refinería del Pacífico. Según los propios datos del Gobierno, ésta refinería, que recordemos se puso la primera piedra en el año 2008 junto al presidente Chávez y se prometió inaugurar en el año 2013 (aquí el discurso de Correa aquel día); en aquel entonces se presupuestó en 10 mil millones.

Ahora, 1.500 millones de gasto después, se dice que costará unos 13.000 millones. Si se divide el gasto en estos cuatro años de legislatura serán 3.300 millones al año.

Calculamos 4 años de construcción teniendo en cuenta que en 2008 se planificaban 5 años en total, y que tras 9 años ya se ha avanzado al menos en el allanamiento de los terrenos. (A efectos contables lo mismo da que se financie con cargo a presupuesto o con cargo a deuda, cuando el presupuesto de Ecuador ya tiene un déficit presupuestario tan alto, solo se sumaría a los costes de financiación).

Evidentemente el supuesto ahorro que supondría la Refinería sólo lo sería desde que esté en funcionamiento, algo que ni en los iniciales planes sería antes de 6 años, por lo que no se podrían contabilizar a esta legislatura.

TOTAL GASTO PROMETIDO POR MORENO:

Casas: 3.000 millones

Bono general: 730 millones

Bono ancianos: 490 millones

Universidades técnicas: 1.400 millones

Universidad Santo Domingo: 50 millones

Crédito jóvenes: 75 millones

Empleo jóvenes: 50 millones

Misión ternura: 600 millones

Refinería del Pacífico: 3.300 millones

TOTAL: 9.695 millones de dólares.