Durante el verano en Ecuador los incendios forestales aumentan. Desde el 1 de enero hasta el 30 de agosto de 2023 hubo 1.170 incendios en el país. Los incendios no solo generan grandes pérdidas de vegetación y, a veces, de casas aledañas al lugar.
El humo de incendios que se desprende del contacto del fuego con la vegetación puede tener efectos negativos inmediatos en la salud.
Daniel Segura, gerente del programa Amazonía Sin Fuego del Ministerio de Ambiente Agua y Transición Ecológica (Maate), dice que el humo es un tema especial “porque puede ser una amenaza silenciosa«.
Segura dice que es porque “puede viajar varios kilómetros de distancia y la gente no lo percibe”.
¿Qué causa el humo?
El humo tiene unas partículas llamadas dioxinas que son provocadas por la quema de vegetación y estás dioxinas “son dañinas para la salud pública”, dice Segura.
Según el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades, el humo de incendios forestales se compone de gases y partículas pequeñas que son emanados por la vegetación y los materiales del lugar al quemarse.
Estos compuestos que son llevados por el aire pueden provocar:
- Tos
- Dificultad para respirar con normalidad
- Ardor o picazón en los ojos
- Irritación en la garganta
- Moqueo
- Irritación de las fosas nasales
- Dolor de pecho
- Dolores de cabeza
- Ataques de asma
- Cansancio
- Latidos cardíacos acelerados
Luego de los incendios del 30 de agosto de 2023 en el sector de Puembo, al este de Quito, la Secretaría de Ambiente emitió un comunicado que dice que las emisiones de humo generan compuestos fotoquímicos irritantes y estos afectan a las vías respiratorias.
📌🔥 #AmbienteInforma | Informe actualizado sobre afectaciones a la calidad del aire en Quito, tras el incendio forestal. #QuitoRenace pic.twitter.com/qnmR9wqpYh
— Ambiente Quito (@ambientequito) August 31, 2023
Por eso recomiendan a los habitantes de los sectores cercanos al incendio usar mascarilla.
Niños, adultos mayores, mujeres embarazadas o personas con problemas respiratorios o cardiovasculares pueden verse más afectados por el humo en caso de incendios.
Protección ante el humo
La Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos (SNGR) y los bomberos tienen una lista de consejos para protegerse del humo.
Estos son los principales:
- Estar atentos a los informes que emite la Secretaría de Ambiente y demás autoridades sobre la calidad del aire.
- Evitar salir al aire libre cuando hay incendios cercanos a su vivienda o trabajo.
- Taparse la boca y la nariz con un pañuelo o trapo húmedo.
- Evacuar la zona de trayecto de los incendios forestales basado en la información de las autoridades.
- Si el lugar donde está es seguro, debe quedarse adentro y mantener el aire interior tan limpio como sea posible.
- Mantener puertas y ventanas cerradas.
- Si hay mucho calor afuera, es recomendable encender el aire acondicionado, siempre y cuando esté cerrada la puerta al exterior.
- Si hay bastante humo, no encender nada que queme como velas o estufas.
- No fumar.
- En caso de asma u otra enfermedad pulmonar o cardiovascular, tomar los medicamentos y llamar al doctor si los síntomas empeoran.
- Usar mascarilla de tipo N95.
- Evitar exponerse al humo al hacer actividades al aire libre.
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