Después de más de dos horas de receso, el Presidente Lenín Moreno, su gabinete, y los líderes indígena llegaron a un acuerdo. Arnaud Peral, coordinador residente de las Naciones Unidas en Ecuador, dijo que se creará un nuevo decreto y que se instalará una comisión con los miembros del movimiento indígena, funcionarios del Estado, la ONU y la Conferencia Episcopal. Moreno dijo que el acuerdo “ha significado un sacrificio de cada una de las partes”.

Jaime Vargas, presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador,  reconoció la valentía de “hombres y mujeres que salieron a las calles” durante las manifestaciones. Vargas condenó a las fuerzas armadas y policía por su papel durante las protestas. Dijo que hay 10 asesinados y cerca de 100 desaparecidos en todo el país. Además dijo que han venido hace tiempo pidiendo conversar. Insistió en la renuncia de la Ministra de Gobierno y el Ministro de Defensa. El Presidente Moreno dijo, posteriormente, que tomará en cuenta los pedidos pero que la decisión final será suya. 

El Secretario de la Presidencia, Juan Sebastián Roldán, dijo que se creará un nuevo decreto que garantice que los contrabandistas y los ricos no se lleven los subsidios que no les corresponde. Roldán dijo que han sido doce días muy duros y que nadie quiere que que gente pase con palos amenazandolos.

Moreno finalizó diciendo que lo pedidos extras los van a considerar pero son decididos por el Presidente.