Con dos horas de retraso inició el diálogo entre el gobierno del Presidente Lenín Moreno y los representantes del movimiento indígena. Lenín Moreno inició la mesa de diálogo invitando a las partes a crear “un nuevo decreto perfeccionado” que sustituya al anterior, el 883. Además felicitó a los líderes indígenas por separarse de quienes quieren despedazar al país. Moreno planteó la posibilidad de crear programas de desarrollo del agro y la creación de mesas de diálogo. 

Jaime Vargas, presidente de la Confederación de las Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE), no aceptó  la formación de una comisión. “No venimos a conformar comisiones”, dijo. Vargas pidió que antes de que se envién las reformas a la Asamblea Nacional, la Corte Constitucional realice un control de constitucionalidad de las medidas. Otra de sus exigencias es que el gobierno transparente los acuerdos con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y la separación de la Ministra del Interior, María Paula Romo, y el Ministro de Defensa, Oswaldo Jarrín. 

El Presidente de la Conaie calificó de ministros vagos, que no funcionan y que no planifican de acuerdo a las realidad de sus pueblos. Además dijo que los indígenas, “dueños del petróleo” no tienen ni una calle con cuatro carriles como en Quito y Guayaquil.

Leonidas Iza, presidente del Movimiento Indígena y Campesino de Cotopaxi (MICC), hizo la segunda intervención. Dijo que se está mintiendo en que se pondrá en juego la dolarización y pidió la derogatoria del decreto 883 y que se le está dando demasiado crédito a Rafael Correa al responsabilizarle por las protestas.

Como Jorge Vargas y Leonidas Iza, Eustacio Toala, presidente de la federación Ecuatoriana de Indígenas Evangélicos (FEINE), Abelardo Granda, presidente de la Federación Ecuatoriana de Organizaciones Campesinas, Indígenas y Negras (FENOCIN) y Miriam Cisneros, presidente del Pueblo Sarayaku, también piden la derogatoria del decreto 883.

Richard Martínez, Ministro de Economía, intervino en la mesa de dialogo diciendo  que si el decreto se deroga se favorecerá a los contrabandistas y a los más ricos. Martínez también dijo que no es justo subsidiar un vehículo de 40 mil dólares que usa gasolina extra. Hizo un llamado a buscar mecanismos que no permitan subsidiar a los más ricos y que beneficien a los que menos tienen.