La despenalización del cannabis para uso terapéutico es un gran resultado para todo el movimiento cannábico, dice Gabriel Buitrón, vocero de Ecuador Cannabico. Con el cambio legal, se podrá acceder al autocultivo o a cannabis medicinal de calidad. “Es una planta medicinal”, insiste.

Para Buitrón la  despenalización tiene tres puntos importantes. El primero es el fortalecimiento del autocultivo para autoaprovisionamiento. “Ya que no quitaron el artículo 222 que dice que mientras no sea con fines de comercialización no existe penalización”, dice. También quedaría, según Buitrón, abierta la posibilidad de que los “conocedores de la salud manejen la medicina cannabica como los alópatas, los homeópatas incluso los shamanes”. El tercer punto que menciona es la producción nacional, que convierte al Ecuador en un país poniente en el cultivo de cannabis debido a su  la ubicación geográfica, dice Buitrón.