La minería a gran escala en Ecuador ha empezado. En 2016, en todo el país había 790 mil hectáreas concesionadas a empresas mineras, en 2018 fueron 3 millones. Esta área donde se practicará la extracción de minerales como oro, cobre y plata, es 90 veces el tamaño del Parque Nacional Cotopaxi. Mirador, ubicado en el sur de la Amazonía ecuatoriana, es el primer proyecto de minería a gran escala en Ecuador. Un tipo de minería a gran escala es  la minería a cielo abierto en la que se extraen grandes cantidades de oro, cobre, plata y otros minerales, y está a cargo de grandes empresas trasnacionales. Para extraer los minerales se hacen excavaciones de 300 o hasta 500 metros de profundidad. Aunque las autoridades reconocen las consecuencias irreversibles de la mina, su fase de extracción acaba de empezar. 

  • Si quieres recibir nuestro contenido en tu bandeja de entrada, regístrate aquí.

La explotación de la mina, según estudios de impacto ambiental, pondría en riesgo 4 mil especies de plantas y es posible que se extingan especies de anfibios y reptiles endémicos —que solo existen en ese lugar específico del planeta. El proyecto Mirador —el primero donde se practica minería a gran escala en Ecuador— está entre las provincias de Morona Santiago y Zamora Chinchipe, en la Cordillera del Cóndor. Antes de que se empezara a producir cobre, ya había evidencia de que fuentes de agua, como el Río Quimi, están sucias.

Además de Mirador existen otros proyectos mineros en zonas de alta biodiversidad como Íntag. Ahí los efectos no se han hecho esperar. Desde 2016, por ejemplo, el agua de una de las Cascadas Gemelas está café. Carlos Zorrilla, ambientalista y director ejecutivo de Defensa y Conservación Ecológica de Íntag dice que el Ministerio aprobó la minería en varios bosques protectores de la zona. “En este lugar, el 90% del territorio está cubierto por concesiones o ya otorgadas o en trámite”.