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Críticas, propuestas e ideas 2.0 para el alcalde de Guayaquil. Un experimento de crowdsourcing.

 

Abril 20, 2014

 

Sr. Ab.

Jaime Nebot Saadi

M.I. Municipalidad de Guayaquil

Guayaquil, Ecuador

 

Estimado Sr. Alcalde,

Le escribo a nombre de muchos guayaquileños y guayaquileñas que me hicieron llegar sus inquietudes, ideas, y propuestas para nuestra querida ciudad. El pasado 24 de Marzo hice un llamado a través del sitio web gkillcity.com, respondiendo a una propuesta del Storefront for Art and Architecture, en Nueva York. La respuesta, a través de las redes sociales, ha sido fantástica. Es testimonio del enorme deseo de nuestros conciudadanos de participar activamente en el progreso de la ciudad.

Ante todo, le damos las gracias por su dedicación y servicio a la ciudad. Todo cargo público implica una vocación de servicio y la suya ha sido incuestionable. Las propuestas que le hacemos nacen todas de nuestro cariño a la ciudad y nuestro deseo de trazar el mejor rumbo para su futuro. Aunque su administración lleva muchos años guiando el rumbo de la ciudad, vemos el comienzo de un nuevo período electoral como una oportunidad para revisar el plan de ruta, y conversar sobre que clase de ciudad queremos ser, cómo queremos crecer, y cómo vamos a hacerlo.

Para ser más precisos, se lo comentamos en base a seis temas interrelacionados: Apertura, Ambiente, Transporte, Infraestructura, Cultura, y Visión:

  1. Apertura

Una de las grandes riquezas de nuestra ciudad es su diversidad. Es algo que debemos celebrar y promover. Una de las grandes virtudes de los buenos espacios públicos es que nos permiten conocer y tolerar diferencias, mientras preservamos nuestra propia individualidad. Queremos esa cultura de ciudad, una cultura que promueva el respeto y la tolerancia a diversas opiniones, y que respete, ante todo, los derechos humanos de todos. Es una apertura que comienza con los espacios públicos: menos rejas y más tolerancia a los comerciantes informales, que tanto trabajan por nuestra ciudad. Promover más inclusión es difícil en una ciudad que por muchos años ha sido víctima del mayor desorden, pero es el siguiente paso en un plan hacia una ciudad que reconoce que la diversidad es una de sus mayores riquezas. La apertura también se busca a nivel administrativo: Le pedimos mejoras administrativas en la atención al público en el Municipio: ventanilla única para poner en funcionamiento cualquier negocio, capacitación al personal para brindar un mejor servicio al público, y reingeniería de procesos.

Hago eco de las ideas del arquitecto Teddy Cruz y el ex-Alcalde de Bogotá, Antanas Mockus, para argumentar que no hay transformación de la ciudad sin una transformación de la cultura ciudadana. Los espacios públicos de nuestra ciudad tienen el potencial de crear esta cultura: el espacio educa, como lo dice también la arquitecta guayaquileña Valentina Brevi. Queremos espacios que eduquen para la apertura, la tolerancia, y la aceptación de diferencias.

  1. Ambiente:

Fue el llamado más fuerte de todos: “Un millón de árboles para Guayaquil” (@adeljar). Menos palmeras y más especies nativas de copa amplia, que den sombra y bajen las temperaturas de la ciudad. Comprendemos que estos árboles implican a veces mayor mantenimiento, y causan problemas con los cables, y que a su vez es difícil hacer un cableado subterráneo en una ciudad con el nivel freático de la nuestra. Sin embargo, los beneficios de más áreas verdes hacen que el esfuerzo valga la pena.

Queremos, en conjunto con el tema anterior, mayor acceso a áreas verdes. Una ciudad con parques más verdes, en donde podamos pisar el césped. Por ejemplo, en Boston y Buenos Aires, se le presta poca atención a la parte ornamental, y hay más énfasis en tener áreas de césped abiertas al público—es una dicha poder sentarse bajo un árbol y ver pasar la ciudad. Algunos ciudadanos sugieren incentivos para jardines privados, que ayuden a subir el coeficiente de áreas verdes de la ciudad, o proponen una normativa para implementar un porcentaje mínimo de área verde en nuevas obras. Más áreas verdes en los parques existentes, y más atención a los pequeños parques vecinales.

Hubo también muchos llamados a la conservación del patrimonio natural del cantón: la recuperación del Estero Salado, que va de la mano con el control de las inundaciones. Usted debe saber que este es un tema de preocupación global, que ha afectado a muchas ciudades. Nueva Orleans es un caso que Guayaquil debería estudiar con atención: es una ciudad en donde la deforestación de barreras naturales agravó las consecuencias de un fenómeno natural. Ha habido grandes progresos en la recuperación del Estero, pero es imprescindible seguir avanzando. Nos preocupa la existencia de canteras dentro del perímetro urbano, y la necesidad de dragar los ríos y la destrucción de los cerros. Guayaquil crece, pero es importante crecer con una visión que controle la contaminación, y proteja sus ríos y esteros, bosques y cerros.

Finalmente, se necesita mayor regulación en cuanto al control de ruido y polvo en la ciudad. Funcionan, aún, discotecas y bares encubiertos en sectores residenciales, perjudicando a los ciudadanos que sí respetan las ordenanzas (una, por muchos años, junto a mi casa!). Queremos una ordenanza que regule el ruido y controle el impacto ambiental.

  1. Transporte

El tráfico en la ciudad es un problema que afecta a todos. Queremos saber qué prioridades tendrá el Municipio al asumir la competencia del tránsito. Le pedimos mejores conecciones entre grandes sectores y también a la escala de ciudadelas privadas.

La Metrovía ha sido una de las mayores contribuciones de su administración—le pedimos apoyarla y expandirla: más buses alimentadores, con mejor ventilación, y mayor respeto a los horarios. Pero el problema del transporte en Guayaquil no se va a solucionar solo con mejoras a la Metrovía. Es preciso crear más alternativas de transporte sustentable: hoy por hoy, no es posible que una ciudad se maneje con un porcentaje tan alto de vehículos individuales.

La bicicleta es un medio de transporte barato, saludable, y ecológico. Le pedimos un proyecto de ciclovías a nivel urbano. Más ciclovías, tanto para uso diario como recreacional, beneficiarían a un público enorme. Desde los triciclos de los vendedores ambulantes, hasta los ciclistas aficionados de fin de semana, mover más gente a través de la bicicleta le daría grandes beneficios a la ciudad.

Finalmente, tenemos grandes y hermosas avenidas que atraviesan toda la ciudad, y que no aprovechamos. Proponemos el impulso del transporte fluvial. Imagine el alivio que se le podría dar a la congestión de tráfico entre Guayaquil, Samborondón, y Durán, si hubiera medios de transporte seguros y confiables a través de nuestros ríos. Una red de transporte público fluvial a través del Guayas, el Daule, y el Babahoyo, organizada a través de un sistema de embarcaderos conectado al transporte público terrestre, podría articularse facilmente. Dentro de Guayaquil, redes locales usando los ramales del Estero Salado podrían articularse con mayor o menor facilidad dependiendo de los puentes existentes. El transporte fluvial crearía una red adicional de transporte para la ciudad que tiene además la ventaja de rescatar nuestra identidad de puerto y acercarnos a las maravillas particulares de nuestro entorno: nuestros ríos y esteros. Y cuando conocemos mejor las cosas, las queremos más y las cuidamos mejor.

  1. Infraestructura

De la mano del transporte, las diversas redes de infraestructura de la ciudad reclaman constante atención. De los muchos llamados para solución de problemas específicos, proponemos uno en particular: el reciclaje. Proponemos además que incorpore a los chamberos a una red organizada de gestión de residuos. Es uno de muchos ejemplos en los que proponemos incorporar a la informalidad tradicional de nuestra ciudad en lugar de desplazarla.

Muchos piden mejoras en la red de calles, el alcantarillado, y el cableado. Finalmente, aunque agradecemos y comprendemos el gran valor de las obras de regeneración, creemos que a veces sería preferible abarcar un poco más, con menos lujo. O dicho de otra forma: menos porcelanato en las aceras, y más aceras.

  1. Cultura

Queremos una ciudad que apoye y promueva el arte, la cultura, y la ciencia en todos sus aspectos. Al respecto hubo muchas ideas y recordatorios a propuestas existentes. A nivel de ciudad, muchos le piden bajar impuestos a conciertos y espectáculos, y más diversidad cultural y deportiva.

Pedimos impulsar actividades culturales no sólo a nivel masivo, sino también a nivel de barrios y vecindades. Proponemos crear círculos culturales para adultos y niños, y capacitación para promotores y colectivos. Muchas de estas propuestas se podrían facilitar mediante la creación de una red de bibliotecas vecinales, que se conviertan en focos culturales a nivel barrial. Es una solución que ha sido llevada a cabo con gran éxito en Barcelona y Medellín.

Queremos también una mejor gestión cultural para el Museo Municipal. Cuestionamos la falta de profesionales formados con un título en Historia del Arte en el personal del Museo Municipal. Proponemos la digitalización del fondo bibliográfico y hemerográfico de la Biblioteca Municipal, junto con las actas del Cabildo y otros documentos coloniales, para mayor acceso.

Le pedimos el cuidado del patrimonio arquitectónico de la ciudad. El legado de la arquitectura de Guayaquil ha sido valioso y aún estamos a tiempo de protegerlo. La conservación de la arquitectura moderna, de comienzos y mediados del siglo XX, es un tema de debate contemporáneo a nivel mundial: Guayaquil tiene la oportunidad de ser una ciudad líder en el tema. Le pedimos también más fomento a la ciencia. Proponemos coordinar exhibiciones públicas con el Parque de la Ciencia de la ESPOL, y no olvidar el proyecto del Parque Astronómico.

Finalmente, existen programas muy interesantes en muchas ciudades del mundo para promover el grafiti como verdaderos murales públicos—Os Gêmeos, Banksy, y Shepard Fairey son ejemplos conocidos de arte urbano. ¿Porque no crear espacios destinados a este formato?

  1. Visión Futuro

El último punto es, creo yo, el más importante. ¿Cual es la visión para el futuro de la ciudad? ¿Cómo quiere crecer Guayaquil, y cuáles son las medidas que se están tomando al respecto? ¿Cual es el plan a largo plazo, más allá de los períodos electorales? Proponemos un plan a largo plazo, abierto, e inclusivo, con la participación y aprobación de la ciudadanía. Un “Compromiso por Guayaquil,” que sería el mejor legado que podría dejarle a nuestra ciudad. Puede ver su propuesta completa de @edmac78, adjunta. @FatimaQuishpe lo resume con un consejo: Escuchar. Queremos nuevas ideas y nuevas visiones para la ciudad, incluyendo la creación de un distrito metropolitano, o una coordinación con los Municipios vecinos. En cuanto a la planificación del espacio, nos preocupa el excesivo crecimiento horizontal de la ciudad y la falta de ordenamiento de usos urbanos.

Concluyo esta carta con una invitación—me gustaría organizar, en un futuro próximo, una reunión entre funcionarios de la Dirección de Urbanismo, académicos de las principales universidades de la ciudad, y arquitectos guayaquileños. Una reunión entre arquitectos y urbanistas para conversar específicamente de la planificación urbana de la ciudad. Dentro de esta conversación virtual que hemos tenido, Ud., yo, y todos los que se unieron a este llamado, quisiera tener una real, con la participación de las voces de mi profesión, arquitectos y urbanistas, para hablar de la ciudad desde el punto de vista de su planificación y crecimiento.

Finalmente, mi agradecimiento por su recepción anticipada y abierta al proyecto de esta carta. Su apertura demuestra, creo yo, que es posible conversar y discutir opiniones diversas bajo un marco de inclusión. No se olvide de ver los tuits, que van adjuntos.

Saludos,

Ana María León

@amlblog

(a nombre de muchos)