1q8a7232.jpg
1q8a7980.jpg
1q8a7806.jpg
1q8a8331.jpg

Relato de alguien que va a oír música 

Llovió como si se fuera a acabar el mundo. O bueno, no. Sólo llovió como cuando llueve en Bogotá: con ganas. Con las mismas ganas con las que miles de personas recibieron a los nueve artistas que tocaron ayer en el primer día del Festival Estéreo Picnic.

No me imaginaba que la primera vez que fuera a ver a Julián Casablancas en el escenario fuera a ser sola (sí, me perdí del grupo con el que estaba y el que se vuelva a encontrar en Estéreo Picnic es un mago; no, no entran los celulares), y debajo de un poncho azul que, gracias a mi querida hermana que iba bastante más preparada que yo, me salvó de la lluvia. Y definitivamente no pensé que la primera vez que lo fuera a ver sería en Bogotá. Pero con toda esa adrenalina de verlo en el escenario igual me quedé esperando – y creo que el resto de Estéreo Picnic también – que tocará algo de The Strokes. Eso sí el tipo rockeo. Y como lo hizo él, lo hicieron otros y, así, la bienvenida al festival.

Nine Inch Nails me deja corta de palabras, consternada de pensar si todavía se hacen bandas así y si músicos del calibre de Trent Reznor todavía se fabriquen en alguna parte. De Phoenix, vendrán mil artículos. Los tipos cerraron sin duda alguna con broche de oro el primer día del festival. Pero en esta nota me concentro en Babasónicos por la simple razón que de las bandas de ayer, esta era la que más me emocionaba.

En un brillante articulo de la revista Gatopardo sobre Babasónicos publicado en Enero de este año, el guitarrista de la banda, Diego “Uma” Rodriguez, le decía el periodista, “Digamos que nuestra filosofía es esta: si ya compraste un boleto para nuestro show,  te voy a agasajar y esto es una gala. Te voy a consentir con un espectáculo que te va a deslumbrar, y en eso pues la ropa es importante…”

Y sí, se visten como rockeritos. Pero rockeros puramente latinos, con skinny jeans, pero skinny jeans una talla más pegados que si fueran músicos Londinenses, y chaqueta de cuero, pero chaqueta de cuero blanca. Y se mueven como rockstars, pero con una sobre sensualidad que ni el propio Mick Jagger ha intentado demostrar en el escenario. Pero bienvenidos sean los rockeros latinos a esta gala, el espectáculo deslumbró.

Admito que no conozco a los Babasónicos hace tanto. En realidad me metí en el cuento del rock en español tarde, mucho después de haber cortejado un buen tiempo con el rock en inglés. Entonces me llegaron Soda Estereo y los Babas. Y ayer fue el gran climax de una relación que se llevaba formando hace mucho tiempo. Como era de esperarse, Los Babasónicos se fajaron y demostraron que los argentinos siguen siendo los papás del rock en español.

Hoy el escenario es para otros grandes como Cut Copy, Vampire Weekend, Pixies y los esperadísimos Red Hot Chilli Peppers. Parece que está saliendo sol. Esta vez sin poncho, otro día de picnic.