Van doce años de asistir a los EDOC. Van doce años de nuevas miradas y de cuestionar las existentes, doce años de buscar ventanas al mundo y de abrir las nuestras.
Los Encuentros de Otro Cine, los queridos EDOC, inauguraron su último encuentro este jueves 9 de mayo en el Teatro Nacional de la Casa de la Cultura. Hace un año había sucedido lo mismo en el Teatro Universitario. La diferencia, no solo es el nombre del teatro, también es el aforo: de 800 personas en el 2012 a mas de 2000 este año. Sentado en la butaca, esperando su inauguración, reflexionaba sobre un público cada vez mayor y cada vez más dispuesto a disfrutar y consumir la diversidad de la mirada.
Todos los años, en su inauguración, los EDOC se superan a si mismos. El festival ha crecido todos los años en cobertura, en películas, en temas, en asistentes, en salas, en ciudades. Situación paradójica en nuestro país, donde poca atención le prestamos a la circulación masiva de contenidos culturales. Desde mi butaca veía como los EDOC representan la terquedad de una generación que ha encontrado en el documental la posibilidad infinita de las múltiples historias como antídoto a las historias oficiales.
Este año los EDOC, cuenta con doce secciones: Cine en el Cine, Síntoma, Naufragios Políticos, Antes del fin, Todas las Familias Felices, DOCTv Latinoamérica, NewsReels, Como nos ven, como nos vemos, Programa USFQ, Head en Foco, Ancho y Ajeno: Panorama del Mundo, y la sección dedicada a Marcel Lozinski: catalizador de lo real. Secciones que clasifican las mas de cien películas del festival.
Se presentan mas de una docena de películas ecuatorianas en la sección Como nos ven, como nos vemos. En la revista oficial del festival Alfredo Mora Manzano cuenta que recibieron mas de 30 propuestas para ser analizadas por el comité de programación. El mismo Alfredo hace referencia a las facilidades actuales del cine digital y como este ha influido para que la producción nacional se multiplique. Escenario tecnológico favorable en un país donde el presupuesto asignado para el fomento del cine y el audiovisual ha sido mínimamente ajustado en los últimos 6 años.
En la noche de la inauguración, no solo está arrancando este maravilloso encuentro. Manolo Sarmiento y Lisandra Rivera, estrenan “la Muerte de Roldós”, un trabajo de más de 6 años de investigación y producción sobre el “que pasó” con el presidente que inauguró en 1979 el retorno a la democracia en el Ecuador. Manolo y Lisandra devuelven con su película el recuerdo de Roldós a la memoria colectiva de nuestro país para entender y reflexionar sobre el archivo de una muerte que marcó nuestro devenir político.
El hashtag #EDOC12 representa hoy no solo a un grupo de fanáticos cinéfilos dispuestos a ver mas de tres películas diarias corriendo de un cine a otro y llenando de otras miradas a las suyas propias. Representa también a un país que demanda del documento audiovisual imágenes que le cuenten las historias íntimas, las historias colectivas, la diversidad de las miradas y sobre todo le faciliten el acto de tener y usar su memoria.
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Paco Salazar
